En el mismo momento en que Ucrania atraía la atención del mundo por las protestas sociales que exigían la salida del entonces presidente Víktor Yanukóvich,  hacía historia otro ucraniano, Jam Koum (38 años), quien salió de su país a los 16 años junto a su madre para vivir en Estados Unidos. Koum y Brian Acton (44 años) son los creadores de WhatsApp, el exitoso servicio de mensajería instantánea para teléfonos inteligentes, que compró Facebook por la impresionante cifra de $ 19 000 millones.

Su experiencia recuerda a otros jóvenes emprendedores en Estados Unidos que fracasaron muchas veces sin rendirse para luego acertar y volverse millonarios desde el Silicon Valley, cuna de empresas gigantes como Google, Yahoo, Facebook, etc. En el caso de WhatsApp, la aplicación se creó hace casi 5 años y desde entonces se multiplicó por todos los rincones del mundo hasta ganar la atención de Facebook, el líder de las redes sociales creado por Mark Zuckerberg (29 años). La compañía pagó por WhatsApp unos $ 16 000 millones de dólares más $ 3 000 millones en acciones para fundadores y empleados. La primera cifra representa el producto interno bruto (PIB) de un país como Georgia y equivale a la construcción de   10 000 Escuelas del Milenio.

Muchos se preguntan, ¿por qué WhatsApp vale tanto?, ¿qué exactamente compró Facebook?  WhatsApp, hasta ahora la aplicación más cara de la historia, cautivó al mercado con la consigna de ser un servicio de mensajería en tiempo real “simple y personal”. Las cifras de su éxito son dicientes: 419 millones de usuarios en 5 años, un millón de nuevos registrados cada día, envío diario de 19 000 millones de mensajes escritos, 200 millones de mensajes de voz y 600 millones de fotos. Todo esto a un mínimo o ningún costo. Descargar WhatsApp cuesta $ 0,99 por año aunque en algunos países como el Ecuador es posible acceder a la aplicación gratuitamente.

La atracción creció de una manera impresionante. El gráfico 1 muestra el número de usuarios de las más populares redes sociales. En el mismo tiempo, WhatsApp consiguió casi el triple de usuarios que Facebook y supera por mucho a Gmail, Twitter y Skype.

El trato entre Facebook y WhatsApp es el último de otros negocios millonarios del mercado tecnológico. En el gráfico 2 se puede observar cómo grandes empresas (las que aparecen en primer lugar) compraron a otras (las que están en segundo lugar) y así se volvieron gigantes conglomerados de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación. Este sector de la economía estadounidense se ha convertido en el nuevo “El Dorado” y visualiza la vigencia del “sueño americano” en la era digital, escribió Claudio Scaletta, en el diario argentino Página/12.

Lo que vale es la información

¿Cómo valorar la compra de WhatsApp? Analistas consultados coinciden en que Facebook compró WhatsApp para expandir su presencia en la red, pero sobre todo para usar la valiosa información de los cientos de millones de usuarios de su nueva empresa para la publicidad que exhibe en su plataforma.

“Si uno ve al negocio simplemente como la adquisición de la tecnología, Facebook pagó demasiado por WhatsApp porque ellos podían implementar un sistema similar por una fracción del costo, pero lo que realmente Facebook está comprando es la información de la gente que es usuaria de WhatsApp”, explicó Xavier Ochoa, profesor e investigador del Centro de Tecnologías de la Información de la Universidad Politécnica del Litoral (Espol).

De otro lado, para las empresas es fundamental llegar a audiencias de todo tipo y contar con un mercado segmentado. “El valor de WhatsApp está en la cantidad de información que cada usuario proporciona acerca de su actividad humana y consumista para que sea utilizada por terceros. WhatsApp garantiza una base de datos segmentada, semiabierta y con una dispersión geográfica enorme, mayor que Facebook”, estimó Sergio Jiménez, español radicado en Ecuador, gerente de Soastec, compañía especializada en comunicación digital.

A diferencia de Facebook, WhastApp no incluye publicidad en el uso de la aplicación y muchos esperan que eso no cambie, aunque es casi seguro que la información de los usuarios va a ser usada para la publicidad en la empresa de Zuckerberg.

Facebook, por donde pasa buena parte de las comunicaciones del mundo, compró por segunda ocasión una aplicación exitosa. En 2012 adquirió por $ 1 000 millones Instagram, la red social para compartir fotografías. La estrategia responde “a la constante necesidad de Facebook de expandir sus fronteras y de no poner sus recursos en juego en una sola red social, sino de irse ampliando como lo han hecho Google y otras empresas de este tipo”, opinó José Valenzuela, gerente general de A+A Consulting, agencia ecuatoriana de comunicación y marketing digital. “Ninguna plataforma digital se va a mantener de por vida, por eso hay que apostar a la diversificación”, agregó.

Reacción del mercado bursátil

El mercado también respondió. Facebook no es solo una red para contactar amigos, comunicar estrategias publicitarias, enviar mensajes y hasta convocar manifestaciones políticas. Es una empresa de éxito que entró en el mercado bursátil en mayo de 2012. Fue la mayor entrada en la Bolsa de Nueva York de todos los tiempos de una compañía en Internet. La firma alcanzó una capitalización bursátil de $ 104 000 millones. El día de su ingreso, la acción fue lanzada a $ 38 y subió hasta $ 42,55.

La compra de WhatsApp llegó a inquietar a los inversores recelosos por el elevado precio de la operación y el día del anuncio del trato millonario, Facebook registró caídas en las bolsas del mundo de entre 2% y 3%. Del otro lado, las acciones de Twitter y BlackBerry registraron alzas en las cotizaciones. Pero al poco tiempo, el recelo pasó y la cotización de Facebook volvió a subir y se ubicó a finales de la semana pasada en cerca de $ 70 la acción.

Entidades como Citigroup también se pronunciaron sobre la operación. “Facebook está comprando el líder global de mensajería móvil, lo que supone un activo muy valioso en términos de oportunidades de monetización”, indicó en un informe del 19 de febrero. “La valoración de la empresa parece razonable e incluso conservadora en comparación con sus competidores”, agregó, mencionando cifras de usuarios y de tráfico de datos de WhatsApp.

Pero luego de concretarse la compra, una inesperada falla de conexión frustró el buen desempeño de WhatsApp que dejó sin servicio durante 4 horas a sus usuarios el sábado 22 de febrero. Ese tropiezo fue aprovechado por la empresa Telegram, otra aplicación de mensajería, creada por el “Zuckerberg ruso”, Pável Dúrov, que captó casi 9 millones de nuevos registros en 4 días. A través de esta aplicación se pueden enviar chats secretos, así como mensajes que se autodestruyen. Del otro lado, WhatsApp anunció una novedad:  ofrecer llamadas gratuitas en el último trimestre de este año.

Así, el mundo tecnológico sigue su marcha con innovaciones constantes mientras mentes brillantes continúan diseñando programas para satisfacer todo tipo de necesidades a la espera de noticias sobre el próximo gran negocio.