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¿Cuál es el aporte del mar a la economía ecuatoriana?
La explotación de petróleo y gas, el transporte comercial y la pesca son los tres tipos de aprovechamiento de los océanos. Luego están la extracción de minerales, la utilización de la energía del oleaje y las mareas, la obtención del agua dulce, el uso de la energía solar que observe el mar, etc.
El Gobierno ecuatoriano también le apuesta a la “economía azul” o del mar para desarrollar la matriz productiva y resolver el desempleo, la pobreza y la inequidad. Esta vez quiere hacerlo con la modernización de los puertos, el desarrollo del sector pesquero, la construcción de astilleros, y la exploración y explotación de gas natural del Golfo de Guayaquil.
Junto a esta tendencia se encuentra un empresariado que navega en aguas más tranquilas y que ha aprendido de las crisis vividas cómo llegar a puertos seguros. “Los empresarios creen en el cambio de la matriz productiva, están conscientes de que pueden hacer negocios efectivos; hay un clima muy favorable para la inversión y lo están haciendo”, afirmó el ministro de Industrias y Productividad, Ramiro González.
Según el Plan Nacional del Buen Vivir 2013-2014, en 2012, el 44% de la producción nacional estaba compuesta de bienes primarios, industriales y servicios de reducido valor agregado; y el otro 56%, por servicios de alto valor agregado.
El Banco Central reveló que el 72% de las exportaciones está constituido por bienes primarios, seguido por los bienes industrializados con el 21% y tan solo el 7% en servicios. Para 2030, Ecuador exportará un 40% de servicios, en su mayor parte de alto valor agregado y con una participación relevante del turismo, 30% de bienes industrializados y 30% de productos primarios.
Complementariamente, la transformación de la matriz productiva requiere el incremento de la participación de gas natural para usar sus derivados en el sector industrial, lo que induce a campañas de exploración y explotación offshore (mar afuera) del hidrocarburo.
Gráfico 1
El plan destaca que con la transformación de la matriz, la balanza comercial no petrolera alcanzará niveles próximos al equilibrio, en virtud de una consolidación del proceso de sustitución de importaciones. La cuenta de servicios de la balanza de pagos mantendrá un menor d
éficit de características estructurales, inherente a la dependencia en los servicios de transporte marítimo, principalmente importados, y al afianzamiento de la exportación de servicios profesionales y turísticos que generen más fuentes de empleo con capacidades específicas para su desarrollo.
La economía marina es el resultado de una serie de actividades que el hombre realiza para explotar los recursos naturales renovables y no renovables del océano y que aportan ganancias. La explotación de petróleo y gas, el transporte comercial y la pesca son los tres tipos de aprovechamiento que producen el mayor ingreso para los países. Le siguen la extracción de minerales, la explotación de compuestos químicos, la utilización de la energía del oleaje y las mareas, la obtención del agua dulce, el uso de la energía solar que absorbe el océano, y las actividades turísticas y recreativas.
Sin embargo, con excepción de los recursos pesqueros, aún no se explota en su totalidad la riqueza que los océanos poseen. Por encontrarse en la etapa experimental, la economía marina se considera como la “economía del porvenir”.
Ecuador ha avanzado poco en el uso de la energía solar, pero ya da pasos importantes en la utilización de energía eólica o del viento, en las Islas Galápagos y en Villanaco, Loja, al sur del país.
Muchos países a escala mundial coordinan a través de organismos internacionales, como la Comisión Oceanográfica Intergubernamental y el Consejo Internacional para la Investigación del Mar, entre otras, para lograr el éxito en este campo, y los científicos de la Unión Soviética, Estados Unidos, Japón, Inglaterra, Francia, Alemania y Canadá están obteniendo resultados importantes.
Asimismo, las actividades turísticas y recreativas en el mundo, relacionadas con el océano, se han incrementado notablemente y son muchos los lugares del planeta donde existe la infraestructura para realizar esas labores, como en el puerto de Acapulco y Zihuatanejo en Guerrero, y Cancún en Quintana Roo, en México, o la Costa Azul en Europa. Los cruceros a través de los diferentes mares son cada vez más numerosos y llamativos; esto también sucede con los deportes, y las competencias se multiplican a escala internacional.
Junto a la “Economía azul” está un empresariado que ha llegado a puertos seguros. Esto lo destaca el ministro de Industrias y Productividad, Ramiro González, quien resaltó la actitud positiva del sector y la necesidad de hacer negocios efectivos en el marco de un clima favorable para la inversión.
En Ecuador, el territorio marino-costero continental (que se extiende hasta 10 kilómetros desde el punto de marea más alta, e incluye ecosistemas como el manglar) bajo conservación o manejo ambiental, alcanza actualmente, 440.847 hectáreas, informó el Ministerio del Ambiente. Esto se logró gracias a la implementación de estrategias de conservación como la recuperación y reforestación de alrededor de 5.236 hectáreas manglar –que incluyó el desalojo de 2.021 hectáreas de camaroneras que se encontraban en áreas protegidas– y la aprobación de 300 planes de reforestación de manglar. (Ver mapa 4)
Por ello, el Ministerio asegura que en 2013 la superficie de manglar sea mayor a la que se destina a las camaroneras. Adicionalmente, hasta 2012, se concesionaron 50.752 hectáreas de manglar a 44 comunidades ancestrales.
A pesar del significativo porcentaje de territorio bajo conservación, el 43% de áreas continentales de inmenso valor en términos de biodiversidad y servicios ecosistémicos, aún no se encuentra en ninguna categoría de protección. De igual manera, existen todavía alrededor de 603.505 hectáreas de áreas marinas sin protección, a pesar de ser consideradas de gran valor.
En consecuencia, el Plan Nacional del Buen Vivir sostiene que las acciones del Estado deberán orientarse a garantizar el mantenimiento de la biodiversidad existente en aquellas zonas que aún no se hallan bajo protección.
Gráfico 2
El Archipiélago de Galápagos también cuenta con una gran biodiversidad terrestre y marina, caracterizada por la existencia de altos niveles de endemismo de flora y fauna. Gracias a su localización y a la presencia de diversas corrientes marinas, las islas constituyen un verdadero laboratorio natural de procesos evolutivos aún inalterados, destaca el Plan.
En efecto, la Reserva Biológica Marina de la provincia insular se extiende hasta 40 millas náuticas alrededor de la línea base de las islas periféricas, y comprende una superficie de 14,1 millones de hectáreas, de las cuales, alrededor de la mitad corresponde a aguas interiores al archipiélago.
Así, los ecosistemas y la diversidad biológica de la zona marina y costera ecuatoriana albergan un sinnúmero de recursos finitos que favorecen a pescadores artesanales y de mediana y gran industria.
Para fomentar la conservación de la biodiversidad marina, el desarrollo de la investigación científica, la innovación tecnológica y las actividades productivas y de prospección para el uso eficiente de los recursos, se creó en 2012 la Secretaría Técnica del Mar (Setemar).
Modernización de los puertos
La ubicación geográfica privilegiada de Ecuador, al noroeste de Sudamérica, le permite acceder directamente a la mayoría de países de América del Sur, Central y del Norte, así como al resto de naciones de la cuenca del Pacífico. En esta misma zona se pueden incluir los países del Archipiélago Indonésico y de Australia, cuyo potencial de mercado ya está siendo activamente explorado por Ecuador.
La mayor parte del comercio se realiza por vía marítima; mientras que anualmente más de 2.500 buques salen de los puertos ecuatorianos. Sin embargo, una importante fracción del comercio exterior se realiza por vía aérea, principalmente, desde el aeropuerto de Quito.
En breve
Guayaquil. Posee el primer puerto nacional para el movimiento de la carga del comercio exterior. Maneja el 70%.
Esmeraldas. Cuenta con todas las facilidades requeridas para carga y descarga de mercadería.
Manta. La ley para su desarrollo le declaró como Puerto Internacional de Carga, el 17 de septiembre de 1997.
Balao. Puerto limpio. Las actividades se sujetan al control ambiental para el embarque y desembarque de petróleo.
Pero, a pesar de tener un litoral pequeño, Ecuador cuenta con seis puertos especializados, cada uno en sus actividades. Puerto Bolívar es bananero y cacaotero; Guayaquil opera con carga general de exportación e importación; Manta es puerto turístico y pesquero; Esmeraldas de carga general; Balao trabaja con petróleo, y San Lorenzo se dedica a la movilización de madera.
El desembarque de mercaderías se efectúa más por los puertos de Manta, Posorja y Guayaquil, este último, maneja aproximadamente el 70% del movimiento de la carga del comercio exterior. (Ver mapa 1)
Para aprovechar esa forma de hacer economía, el Gobierno anunció la ampliación y especialización de los puertos marítimos de Manta y Esmeraldas, y la reubicación del de Guayaquil.
Eso permitirá incrementar, en el mediano plazo, la capacidad de carga anual en 50 millones de toneladas de cada puerto. Es decir, 150 millones en total. Para el efecto se creará una Autoridad Portuaria que se encargue de manejar esta infraestructura en el Golfo donde se localizan los muelles de Guayaquil, Bolívar y pequeños atracaderos en La Libertad, incluyendo Monteverde.
El presidente Rafael Correa informó que actualmente, el puerto de Guayaquil mueve unos 22 millones de toneladas de carga al año, mientras que el de Puerto Bolívar alrededor de 3 millones. Y propone especializar los muelles. Por ejemplo, el de Puerto Bolívar que se dedique, exclusivamente, a la exportación de frutas, y el de Esmeraldas al movimiento de automóviles, a más de ser un sitio de venta internacional de petróleo e importación de combustibles para abastecer el mercado nacional.
Conforme el proyecto, el puerto marítimo saldrá del Golfo de Guayaquil. Para el efecto, se realizan los estudios desde Posorja hasta cerca de Chanduy, en el límite con la provincia del Guayas, que se caracteriza por tener aguas profundas que facilitan el movimiento de los barcos.
Los análisis también permitirán localizar el “mejor lugar” para el futuro puerto de Guayaquil, que al momento está colapsado con la operación de 22 millones de toneladas anuales. La idea -dijo el Mandatario- es que la capacidad de carga se incremente a 50 millones de toneladas. Lo mismo sucederá con los puertos de Manta y Esmeraldas.
Gráfico 3
Explicó que la extensión actual de dichos recintos está limitada a cargar solo hasta 12 metros de calado y que únicamente el de Manta permite un mejor acoplamiento de las naves.
La propuesta es ampliar este último puerto para atender la demanda de buques de hasta 15 metros de calado, denominados Post Panamax, y hasta 8.000 TEUS (contenedores) para que el país sea más competitivo en el comercio exterior. Para el efecto, se le dotará de una amplitud de 600 mil TEUS y 10 millones de toneladas, con un horizonte al año 2028. (Ver gráfico 2)
En Manta, la movilización de la carga creció en un 11% (de 813.271 toneladas en 2009 a 902.670 en 2011). También se registra un aumento del 57% de barcos atendidos, al pasar de 761 en 2009 a 1.194 en 2011), confirman datos oficiales.
Asimismo, la recaudación registró un incremento de 7,1 millones en 2010, a 8,7 en 2011. En cuanto a la carga durante 2012, la Dirección de Promoción y Comercialización indicó que hubo un incremento del 56% en relación a 2011, en las líneas de negocio de carga general, graneles sólido y líquidos y pesca nacional.
Por su parte, el puerto de Esmeraldas movilizó en 2010 una carga de importación del orden de las 423.579,00 toneladas métricas; mientras la carga de exportación fue de 221.935,00 toneladas.
Desarrollo del sector pesquero
El ministro de Industrias y Productividad, calificó de “fabulosa” la expansión de la industria pesquera ecuatoriana, principalmente en Manta y Guayaquil, donde se encuentran procesadoras de atún y pescado y enlatadoras con “calidad espectacular”.
Señaló que hay fábricas que han hecho inversiones importantes y “no le piden favor a ninguna del exterior, con una asepsia impresionante, maquinaria moderna, capacitación y formación del personal”, de tal forma que el producto nacional -algunos que ni siquiera se conocen aún en el mercado interno- se está exportando. “Es un esfuerzo muy fuerte en inversiones que está haciendo el sector privado, atraído por el cambio de la matriz productiva y los beneficios que otorga el Código de la Producción”.
Más que instalar nuevas fábricas, los empresarios han modernizado las existentes. Por ejemplo en Manta, Marbelize S.A con su marca Yeli, Industria de Enlatados Alimenticios C.A., lidera el mercado de conservas de atún y tiene una plantilla de 900 trabajadores.
La futura flota naviera acional requiere de al menos, 10 buques Post Panamax de hasta 150 mil toneladas de peso muerto, y 10 plataformas costa afuera “Sea Pony”.
La capacidad actual de los puertos tiene una limitación para cargar 12 metros de calado. El objetivo es superar los 15 metros.
La industria hidrocarburífera de gas natural y la maricultura demandan facilidades de servicios offshore (costa afuera) para su desarrollo.
Las exigencias de los ecuatorianos ha hecho que las empresas incluyan nuevas variables de presentación del producto, y con ello, el sistema de enlatado “Abre fácil” que incentiva el consumo.
También marcas como Starkist, Barbatun hicieron su presencia en el mercado de conservas de atún en Guayaquil a mediados de 2007. Pero la sorpresa fue que las grandes cadenas de supermercados como La Favorita, Importadora el Rosado y Tiendas Industriales Asociadas S.A. también empezaron a incursionar en forma silenciosa, antes que Starkist y Barbatun.
El mercado tradicional representa alrededor del 60% de ingreso para estas empresas, y dejan una participación del 20% a los supermercados, y el 20% restante, ente mayoristas y otros tipos de despensas. Una de las empresas que ha manejado un excelente canal de distribución es Nirsa, la cual se enfoca con mayor esfuerzo al mercado tradicional, sin dejar a un lado el de autoservicios.
El ministro González indicó que el 60% de productos del mar se exporta a Europa y el 40% restante a Estados Unidos, América Latina y Asia.
Solo en la exportación de camarón, Ecuador es tercero en el mundo y el primer latinoamericano, tanto para Estados Unidos como para el bloque europeo; 2010 fue el mejor año para el crustáceo, con ventas que llegan a alrededor de 735 millones de dólares.
En este contexto, el ministro explicó que el cambio que experimenta el sector productivo exige una estricta política de calidad. “Es nuestro deber -destacó- controlar que los productos y servicios cumplan con normas que protejan a los consumidores ecuatorianos”.
Ana Cox, subsecretaria de la Calidad, sostuvo que si el país busca competir en mercados internacionales, debemos crecer en cuanto a la infraestructura de la calidad, con normas, reglamentos técnicos, metrología, laboratorios de ensayo, evaluación de la conformidad y acreditación. “Esto nos permite acercarnos a los países industrializados, ya que ellos soportan su expansión comercial en el gran número de normas y reglamentos técnicos que poseen”.
Construcción de astilleros
El vicepresidente Jorge Glas anunció que la política en esta materia del Gobierno se complementa con la construcción del Astillero del Pacífico, que aspira a captar cuota de mercado en el sector de las reparaciones y entrar en el segmento de nuevas construcciones de buques Post Panamax.
El proyecto está a cargo de la empresa pública Astilleros Navales Ecuatorianos (Astinave) que tiene un financiamiento del Gobierno ecuatoriano de 1,5 millones de dólares para los estudios de ingeniería de detalle.
Entre los factores determinantes para construir el astillero están la ampliación del Canal de Panamá que culminará en 2014; la demanda de nuevos buques tipo Post Panamax de hasta 150.000 toneladas de peso muerto (DWT); la construcción de la refinería del Pacífico con una planta de conversión profunda, cuya operación está prevista para el año 2016 que demandará facilidades y servicios costa afuera, así como buques Post Panamax para el transporte de combustibles.
La industria carburífera de gas natural y minera costa afuera, así como la maricultura, también exigirán ese tipo de servicios. Otro punto que considera Astinave es el referente a los puertos de aguas profundas que ayudarán a incrementar el tráfico de buques de mayor tonelaje. Esto, a la vez, aumentará la demanda de servicios de las mencionadas naves.
El Astillero del Pacífico se erigirá en la localidad de Posorja, a 120 kilómetros al oeste de Guayaquil, estratégicamente ubicado en el Estrecho del Morro, frente a la isla de Puná, en una zona que posibilita, por su calado y accesos, el tránsito de buques Post Panamax.
En los estudios conceptuales se prevé una inversión cercana a los 600 millones de dólares. La inversión se completaría con la dotación de infraestructuras adicionales de urbanización y servicios en torno a 150 millones de dólares y un fondo de contingencia de 40 millones.
Además, Astinave aspira a que el Astillero del Pacífico proporcione el mantenimiento a los buques de la empresa pública Flota Petrolera Ecuatoriana (Flopec), que cuenta con una flota de siete buques de más de 50 mil DWT. Además prevé atender las necesidades de nuevas construcciones de la Flopec durante los próximos años, cifradas en 10 buques Post Panamax.
La empresa estudia también captar entre el 3% y el 10% de la demanda de reparaciones en Latinoamérica, con una expectativa de negocio de 80 millones de dólares anuales. La construcción de unidades para la Marina de Guerra, el desarrollo de productos para el mercado offshore y el apoyo a la flota atunera completan las áreas de negocio fijadas como objetivo por la empresa, reveló Astinave.
Añadió que con el proyecto se pasará de un gremio a una sociedad de conocimiento y a un cambio de mentalidad de que la tecnología para reparar y construir buques existe solo al norte del continente, en Europa o Asia.
Todo esto se impulsará en el desarrollo de la industria siderúrgica, cuyo objetivo es cubrir la demanda de las planchas para la estructura de casco y accesorios de los buques.
Explotación de gas natural
Con la perforación de cuatro pozos de desarrollo y dos exploratorios, se incrementará a 100 millones de pies cúbicos la extracción de gas natural en el golfo de Guayaquil hasta finales de este año, un 66% más del volumen actual de 60 millones de pies cúbicos.
El campo Amistad cuenta con reservas por 1,7 millones de pies cúbicos de gas, hidrocarburo que se emplea en la generación termoeléctrica y reemplaza al diésel. Según el cronograma previsto por la empresa pública Petroamazonas, los pozos exploratorios se perforan en zonas del norte del bloque donde los estudios indican que hay 85% de la existencia de gas natural. De tener éxito y hacer las inversiones necesarias de desarrollo, el país dispondrá en 2015 de entre 500 millones y 600 millones de pies cúbicos diarios.
El Gobierno ecuatoriano también le apuesta a la “economía azul” o del mar para desarrollar la matriz productiva y resolver el desempleo, la pobreza y la inequidad. Esta vez quiere hacerlo con la modernización de los puertos, el desarrollo del sector pesquero, la construcción de astilleros, y la exploración y explotación de gas natural del Golfo de Guayaquil.
Junto a esta tendencia se encuentra un empresariado que navega en aguas más tranquilas y que ha aprendido de las crisis vividas cómo llegar a puertos seguros. “Los empresarios creen en el cambio de la matriz productiva, están conscientes de que pueden hacer negocios efectivos; hay un clima muy favorable para la inversión y lo están haciendo”, afirmó el ministro de Industrias y Productividad, Ramiro González.
Según el Plan Nacional del Buen Vivir 2013-2014, en 2012, el 44% de la producción nacional estaba compuesta de bienes primarios, industriales y servicios de reducido valor agregado; y el otro 56%, por servicios de alto valor agregado.
El Banco Central reveló que el 72% de las exportaciones está constituido por bienes primarios, seguido por los bienes industrializados con el 21% y tan solo el 7% en servicios. Para 2030, Ecuador exportará un 40% de servicios, en su mayor parte de alto valor agregado y con una participación relevante del turismo, 30% de bienes industrializados y 30% de productos primarios.
Complementariamente, la transformación de la matriz productiva requiere el incremento de la participación de gas natural para usar sus derivados en el sector industrial, lo que induce a campañas de exploración y explotación offshore (mar afuera) del hidrocarburo.
"El Astillero del Pacífico en Posorja, es uno de los grandes proyectos industriales para el cambio de la matriz productiva, junto con las plantas de siderurgia y de urea.
Espera captar entre el 3% y 10% de la demanda de reparaciones de barcos de América Latina."
El plan destaca que con la transformación de la matriz, la balanza comercial no petrolera alcanzará niveles próximos al equilibrio, en virtud de una consolidación del proceso de sustitución de importaciones. La cuenta de servicios de la balanza de pagos mantendrá un menor déficit de características estructurales, inherente a la dependencia en los servicios de transporte marítimo, principalmente importados, y al afianzamiento de la exportación de servicios profesionales y turísticos que generen más fuentes de empleo con capacidades específicas para su desarrollo.
La economía marina es el resultado de una serie de actividades que el hombre realiza para explotar los recursos naturales renovables y no renovables del océano y que aportan ganancias. La explotación de petróleo y gas, el transporte comercial y la pesca son los tres tipos de aprovechamiento que producen el mayor ingreso para los países. Le siguen la extracción de minerales, la explotación de compuestos químicos, la utilización de la energía del oleaje y las mareas, la obtención del agua dulce, el uso de la energía solar que absorbe el océano, y las actividades turísticas y recreativas.
Sin embargo, con excepción de los recursos pesqueros, aún no se explota en su totalidad la riqueza que los océanos poseen. Por encontrarse en la etapa experimental, la economía marina se considera como la “economía del porvenir”.
Ecuador ha avanzado poco en el uso de la energía solar, pero ya da pasos importantes en la utilización de energía eólica o del viento, en las Islas Galápagos y en Villanaco, Loja, al sur del país.
Muchos países a escala mundial coordinan a través de organismos internacionales, como la Comisión Oceanográfica Intergubernamental y el Consejo Internacional para la Investigación del Mar, entre otras, para lograr el éxito en este campo, y los científicos de la Unión Soviética, Estados Unidos, Japón, Inglaterra, Francia, Alemania y Canadá están obteniendo resultados importantes.
Asimismo, las actividades turísticas y recreativas en el mundo, relacionadas con el océano, se han incrementado notablemente y son muchos los lugares del planeta donde existe la infraestructura para realizar esas labores, como en el puerto de Acapulco y Zihuatanejo en Guerrero, y Cancún en Quintana Roo, en México, o la Costa Azul en Europa. Los cruceros a través de los diferentes mares son cada vez más numerosos y llamativos; esto también sucede con los deportes, y las competencias se multiplican a escala internacional.
En Ecuador, el territorio marino-costero continental (que se extiende hasta 10 kilómetros desde el punto de marea más alta, e incluye ecosistemas como el manglar) bajo conservación o manejo ambiental, alcanza actualmente, 440.847 hectáreas, informó el Ministerio del Ambiente. Esto se logró gracias a la implementación de estrategias de conservación como la recuperación y reforestación de alrededor de 5.236 hectáreas manglar –que incluyó el desalojo de 2.021 hectáreas de camaroneras que se encontraban en áreas protegidas– y la aprobación de 300 planes de reforestación de manglar. (Ver mapa 4)
Por ello, el Ministerio asegura que en 2013 la superficie de manglar sea mayor a la que se destina a las camaroneras. Adicionalmente, hasta 2012, se concesionaron 50.752 hectáreas de manglar a 44 comunidades ancestrales.
A pesar del significativo porcentaje de territorio bajo conservación, el 43% de áreas continentales de inmenso valor en términos de biodiversidad y servicios ecosistémicos, aún no se encuentra en ninguna categoría de protección. De igual manera, existen todavía alrededor de 603.505 hectáreas de áreas marinas sin protección, a pesar de ser consideradas de gran valor.
En consecuencia, el Plan Nacional del Buen Vivir sostiene que las acciones del Estado deberán orientarse a garantizar el mantenimiento de la biodiversidad existente en aquellas zonas que aún no se hallan bajo protección.
El Archipiélago de Galápagos también cuenta con una gran biodiversidad terrestre y marina, caracterizada por la existencia de altos niveles de endemismo de flora y fauna. Gracias a su localización y a la presencia de diversas corrientes marinas, las islas constituyen un verdadero laboratorio natural de procesos evolutivos aún inalterados, destaca el Plan.
En efecto, la Reserva Biológica Marina de la provincia insular se extiende hasta 40 millas náuticas alrededor de la línea base de las islas periféricas, y comprende una superficie de 14,1 millones de hectáreas, de las cuales, alrededor de la mitad corresponde a aguas interiores al archipiélago.
Así, los ecosistemas y la diversidad biológica de la zona marina y costera ecuatoriana albergan un sinnúmero de recursos finitos que favorecen a pescadores artesanales y de mediana y gran industria.
Para fomentar la conservación de la biodiversidad marina, el desarrollo de la investigación científica, la innovación tecnológica y las actividades productivas y de prospección para el uso eficiente de los recursos, se creó en 2012 la Secretaría Técnica del Mar (Setemar).
Modernización de los puertos
La ubicación geográfica privilegiada de Ecuador, al noroeste de Sudamérica, le permite acceder directamente a la mayoría de países de América del Sur, Central y del Norte, así como al resto de naciones de la cuenca del Pacífico. En esta misma zona se pueden incluir los países del Archipiélago Indonésico y de Australia, cuyo potencial de mercado ya está siendo activamente explorado por Ecuador.
La mayor parte del comercio se realiza por vía marítima; mientras que anualmente más de 2.500 buques salen de los puertos ecuatorianos. Sin embargo, una importante fracción del comercio exterior se realiza por vía aérea, principalmente, desde el aeropuerto de Quito.
Pero, a pesar de tener un litoral pequeño, Ecuador cuenta con seis puertos especializados, cada uno en sus actividades. Puerto Bolívar es bananero y cacaotero; Guayaquil opera con carga general de exportación e importación; Manta es puerto turístico y pesquero; Esmeraldas de carga general; Balao trabaja con petróleo, y San Lorenzo se dedica a la movilización de madera.
El desembarque de mercaderías se efectúa más por los puertos de Manta, Posorja y Guayaquil, este último, maneja aproximadamente el 70% del movimiento de la carga del comercio exterior. (Ver mapa 1)
Para aprovechar esa forma de hacer economía, el Gobierno anunció la ampliación y especialización de los puertos marítimos de Manta y Esmeraldas, y la reubicación del de Guayaquil.
Eso permitirá incrementar, en el mediano plazo, la capacidad de carga anual en 50 millones de toneladas de cada puerto. Es decir, 150 millones en total. Para el efecto se creará una Autoridad Portuaria que se encargue de manejar esta infraestructura en el Golfo donde se localizan los muelles de Guayaquil, Bolívar y pequeños atracaderos en La Libertad, incluyendo Monteverde.
El presidente Rafael Correa informó que actualmente, el puerto de Guayaquil mueve unos 22 millones de toneladas de carga al año, mientras que el de Puerto Bolívar alrededor de 3 millones. Y propone especializar los muelles. Por ejemplo, el de Puerto Bolívar que se dedique, exclusivamente, a la exportación de frutas, y el de Esmeraldas al movimiento de automóviles, a más de ser un sitio de venta internacional de petróleo e importación de combustibles para abastecer el mercado nacional.
Conforme el proyecto, el puerto marítimo saldrá del Golfo de Guayaquil. Para el efecto, se realizan los estudios desde Posorja hasta cerca de Chanduy, en el límite con la provincia del Guayas, que se caracteriza por tener aguas profundas que facilitan el movimiento de los barcos.
Los análisis también permitirán localizar el “mejor lugar” para el futuro puerto de Guayaquil, que al momento está colapsado con la operación de 22 millones de toneladas anuales. La idea -dijo el Mandatario- es que la capacidad de carga se incremente a 50 millones de toneladas. Lo mismo sucederá con los puertos de Manta y Esmeraldas.
Explicó que la extensión actual de dichos recintos está limitada a cargar solo hasta 12 metros de calado y que únicamente el de Manta permite un mejor acoplamiento de las naves.
La propuesta es ampliar este último puerto para atender la demanda de buques de hasta 15 metros de calado, denominados Post Panamax, y hasta 8.000 TEUS (contenedores) para que el país sea más competitivo en el comercio exterior. Para el efecto, se le dotará de una amplitud de 600 mil TEUS y 10 millones de toneladas, con un horizonte al año 2028. (Ver gráfico 2)
En Manta, la movilización de la carga creció en un 11% (de 813.271 toneladas en 2009 a 902.670 en 2011). También se registra un aumento del 57% de barcos atendidos, al pasar de 761 en 2009 a 1.194 en 2011), confirman datos oficiales.
Asimismo, la recaudación registró un incremento de 7,1 millones en 2010, a 8,7 en 2011. En cuanto a la carga durante 2012, la Dirección de Promoción y Comercialización indicó que hubo un incremento del 56% en relación a 2011, en las líneas de negocio de carga general, graneles sólido y líquidos y pesca nacional.
Por su parte, el puerto de Esmeraldas movilizó en 2010 una carga de importación del orden de las 423.579,00 toneladas métricas; mientras la carga de exportación fue de 221.935,00 toneladas.
Desarrollo del sector pesquero
El ministro de Industrias y Productividad, calificó de “fabulosa” la expansión de la industria pesquera ecuatoriana, principalmente en Manta y Guayaquil, donde se encuentran procesadoras de atún y pescado y enlatadoras con “calidad espectacular”.
Señaló que hay fábricas que han hecho inversiones importantes y “no le piden favor a ninguna del exterior, con una asepsia impresionante, maquinaria moderna, capacitación y formación del personal”, de tal forma que el producto nacional -algunos que ni siquiera se conocen aún en el mercado interno- se está exportando. “Es un esfuerzo muy fuerte en inversiones que está haciendo el sector privado, atraído por el cambio de la matriz productiva y los beneficios que otorga el Código de la Producción”.
Más que instalar nuevas fábricas, los empresarios han modernizado las existentes. Por ejemplo en Manta, Marbelize S.A con su marca Yeli, Industria de Enlatados Alimenticios C.A., lidera el mercado de conservas de atún y tiene una plantilla de 900 trabajadores.
Las exigencias de los ecuatorianos ha hecho que las empresas incluyan nuevas variables de presentación del producto, y con ello, el sistema de enlatado “Abre fácil” que incentiva el consumo.
También marcas como Starkist, Barbatun hicieron su presencia en el mercado de conservas de atún en Guayaquil a mediados de 2007. Pero la sorpresa fue que las grandes cadenas de supermercados como La Favorita, Importadora el Rosado y Tiendas Industriales Asociadas S.A. también empezaron a incursionar en forma silenciosa, antes que Starkist y Barbatun.
El mercado tradicional representa alrededor del 60% de ingreso para estas empresas, y dejan una participación del 20% a los supermercados, y el 20% restante, ente mayoristas y otros tipos de despensas. Una de las empresas que ha manejado un excelente canal de distribución es Nirsa, la cual se enfoca con mayor esfuerzo al mercado tradicional, sin dejar a un lado el de autoservicios.
El ministro González indicó que el 60% de productos del mar se exporta a Europa y el 40% restante a Estados Unidos, América Latina y Asia.
Solo en la exportación de camarón, Ecuador es tercero en el mundo y el primer latinoamericano, tanto para Estados Unidos como para el bloque europeo; 2010 fue el mejor año para el crustáceo, con ventas que llegan a alrededor de 735 millones de dólares.
En este contexto, el ministro explicó que el cambio que experimenta el sector productivo exige una estricta política de calidad. “Es nuestro deber -destacó- controlar que los productos y servicios cumplan con normas que protejan a los consumidores ecuatorianos”.
Ana Cox, subsecretaria de la Calidad, sostuvo que si el país busca competir en mercados internacionales, debemos crecer en cuanto a la infraestructura de la calidad, con normas, reglamentos técnicos, metrología, laboratorios de ensayo, evaluación de la conformidad y acreditación. “Esto nos permite acercarnos a los países industrializados, ya que ellos soportan su expansión comercial en el gran número de normas y reglamentos técnicos que poseen”.
Construcción de astilleros
El vicepresidente Jorge Glas anunció que la política en esta materia del Gobierno se complementa con la construcción del Astillero del Pacífico, que aspira a captar cuota de mercado en el sector de las reparaciones y entrar en el segmento de nuevas construcciones de buques Post Panamax.
El proyecto está a cargo de la empresa pública Astilleros Navales Ecuatorianos (Astinave) que tiene un financiamiento del Gobierno ecuatoriano de 1,5 millones de dólares para los estudios de ingeniería de detalle.
Entre los factores determinantes para construir el astillero están la ampliación del Canal de Panamá que culminará en 2014; la demanda de nuevos buques tipo Post Panamax de hasta 150.000 toneladas de peso muerto (DWT); la construcción de la refinería del Pacífico con una planta de conversión profunda, cuya operación está prevista para el año 2016 que demandará facilidades y servicios costa afuera, así como buques Post Panamax para el transporte de combustibles.
La industria carburífera de gas natural y minera costa afuera, así como la maricultura, también exigirán ese tipo de servicios. Otro punto que considera Astinave es el referente a los puertos de aguas profundas que ayudarán a incrementar el tráfico de buques de mayor tonelaje. Esto, a la vez, aumentará la demanda de servicios de las mencionadas naves.
El Astillero del Pacífico se erigirá en la localidad de Posorja, a 120 kilómetros al oeste de Guayaquil, estratégicamente ubicado en el Estrecho del Morro, frente a la isla de Puná, en una zona que posibilita, por su calado y accesos, el tránsito de buques Post Panamax.
En los estudios conceptuales se prevé una inversión cercana a los 600 millones de dólares. La inversión se completaría con la dotación de infraestructuras adicionales de urbanización y servicios en torno a 150 millones de dólares y un fondo de contingencia de 40 millones.
Además, Astinave aspira a que el Astillero del Pacífico proporcione el mantenimiento a los buques de la empresa pública Flota Petrolera Ecuatoriana (Flopec), que cuenta con una flota de siete buques de más de 50 mil DWT. Además prevé atender las necesidades de nuevas construcciones de la Flopec durante los próximos años, cifradas en 10 buques Post Panamax.
La empresa estudia también captar entre el 3% y el 10% de la demanda de reparaciones en Latinoamérica, con una expectativa de negocio de 80 millones de dólares anuales. La construcción de unidades para la Marina de Guerra, el desarrollo de productos para el mercado offshore y el apoyo a la flota atunera completan las áreas de negocio fijadas como objetivo por la empresa, reveló Astinave.
Añadió que con el proyecto se pasará de un gremio a una sociedad de conocimiento y a un cambio de mentalidad de que la tecnología para reparar y construir buques existe solo al norte del continente, en Europa o Asia.
Todo esto se impulsará en el desarrollo de la industria siderúrgica, cuyo objetivo es cubrir la demanda de las planchas para la estructura de casco y accesorios de los buques.
Explotación de gas natural
Con la perforación de cuatro pozos de desarrollo y dos exploratorios, se incrementará a 100 millones de pies cúbicos la extracción de gas natural en el golfo de Guayaquil hasta finales de este año, un 66% más del volumen actual de 60 millones de pies cúbicos.
El campo Amistad cuenta con reservas por 1,7 millones de pies cúbicos de gas, hidrocarburo que se emplea en la generación termoeléctrica y reemplaza al diésel. Según el cronograma previsto por la empresa pública Petroamazonas, los pozos exploratorios se perforan en zonas del norte del bloque donde los estudios indican que hay 85% de la existencia de gas natural. De tener éxito y hacer las inversiones necesarias de desarrollo, el país dispondrá en 2015 de entre 500 millones y 600 millones de pies cúbicos diarios.
