"Daremos la respuesta que es presentarnos, comparecer en el proceso, responder y que la investigación se dirija donde tiene que estar, en los investigados y no en los investigadores", dijo ayer la ministra de Gobierno, María Paula Romo. La ministra, una jueza, un fiscal y siete policías fueron denunciados este jueves 30 de julio de 2020 por presuntos delitos de fraude procesal, usurpación de funciones públicas, privación ilegal de la libertad, intimidación y asociación ilícita.

Esta queja fue presentada en la Fiscalía por Marcelo Salvador, abogado de Miguel D.M., quien el lunes 27 fue detenido en Tumbaco, en las afueras de Quito. Ese día, los agentes allanaron su casa y encontraron pistolas, fusiles, alimentadoras y municiones.

La ministra Romo dijo que ella y las otras nueve personas comparecerán al proceso y responderán ante la justicia. “Es una forma de amenazar o amedrentar a la Policía Nacional, así que responderemos con las herramientas de la ley”.

Así respondió la mañana de este jueves la ministra de Gobierno, ante la denuncia penal por fraude procesal que le interpuso, a ella y a otros miembros de la Policía, la Fiscalía y un juez de flagrancia, Carlos Miguel D.M. Él fue retenido por mantener en su vivienda tres pistolas, dos fusiles, un rifle de uso especializado, 19 alimentadoras y 9.512 municiones.

Carlos Miguel D. M., en su denuncia, refirió que descansaba en su domicilio cuando arribó alrededor de las 07:00 un escuadrón de la Policía con una orden de allanamiento. La Policía le habría explicado que "mediante información reservada se tuvo conocimiento que en la parroquia Puembo existirían dos inmuebles en los cuales estarían almacenando armas de fuego y munición que habrían ingresado al país de forma ilegal y no poseerían la respectiva documentación legal".

La ministra Romo se refirió al caso una vez que la jueza Geovanna Palacios, luego de una audiencia de flagrancia, lo dejó en libertad y abrió una investigación previa por el delito de tráfico ilícito de armas de fuego. A la ministra le llamó la atención la decisión judicial, pese al arsenal que se le encontró en la casa de Carlos Miguel D. M. (I)