La Sala Penal de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) ratificó la sentencia de 5 meses y 24 días en contra del teniente Fernando E. por odio racial contra Michael Arce.

La resolución se conoció este martes, 5 de julio, en la audiencia por el recurso de casación que interpuso Fernando E. tras ser declarado autor del delito de odio racial en contra de Arce, excadete afrodescendiente de la Escuela Militar Eloy Alfaro (Esmil).

El fallo se dio por unanimidad del tribunal tras acoger el pedido de la Fiscalía.

En una resolución anterior, los magistrados dictaminaron una reparación integral a la víctima. Para ello dispusieron que la Esmil pidiera disculpas a Arce durante una ceremonia militar. Sin embargo, Richard Villagómez, juez ponente, explicó que se modificó esta disposición e indicaron que el acto de reparación debe ser público. Además la sentencia será publicada en los medios de comunicación tanto escritos como electrónicos.

Según la sentencia, el teniente Fernando E. debe cancelar por daños y perjuicios y costas procesales. Además, el procesado y la víctima deben recibir tratamiento psicológico.

Luego de la audiencia, Juan Pablo Albán, abogado de Arce, celebró que la disculpa se haga de forma pública. Añadió que esta disculpa no solo debía ser para Arce, sino para el pueblo afroecuatoriano.

La Fiscalía General del Estado inició las investigaciones el 21 de mayo del 2012. Arce recibió agresiones físicas y psicológicas por parte de su instructor Fernando E., motivo por el cual el joven pidió la baja de la institución militar.

Este es el primer proceso por delito racial que se tramita en el Ecuador. Ante esta situación, el excadete señaló que este hecho sienta un precedente para que las personas denuncien los casos de agresión.

Le gritaban "negro vago" y le obligaron a pelear contra 4 cadetes

"La discriminación era evidente. Le gustaba insultarme delante de todos mis compañeros y se reían de mí", recordó el joven durante las declaraciones que se emitieron en las audiencias de jucios realizadas antes de la casación. 

El muchacho -que cumplió con todos las pruebas físicas y psicológicas junto a otros 5 mil aspirantes para ingresar a la Esmil- recordó que Fernando E. le ponía pruebas más difíciles que al resto de los cadetes.

Citó como ejemplo una prueba de resistencia de caminar pasando varios obstáculos. Arce soportó el peso cargando una mochila con una piedra; el resto de los cadetes cumplía la misma labor sin esa carga. 

Haber sobresalido de entre todos los postulantes y quedar entre los 200 mejores no fue suficiente. Según el joven, el proceso de adaptación de 3 meses que debía cumplir fue "una pesadilla". Solo resistió 8 semanas antes de presentar la denuncia ante la Defensoría del Pueblo. Las autoridades de la Esmil señalaron que este caso no fue de discriminación, sino que el joven no resistió las pruebas físicas. 

A decir del excadete, Fernando E. se encargó de desprestigiarlo e incluso lo puso en contra del grupo. Durante las secuencias de resistencia física le gritaba "negro vago". Le imponía guardias nocturnas hasta la mañana siguiente sin permitirle dormir para recuperar su energía.

Uno de los actos más evidentes, recordó, fue una pelea de box contra 4 cadetes, después obligó a sus compañeros a golpearlo "en montón". Si ellos se negaban, dijo, también les sancionaba.

La represión llegó al punto en que no podía cumplir con sus horas para alimentarse. Recordó que en varias ocasiones le dieron 30 segundos para almorzar, mientras que el resto del grupo tenía media hora. Otras veces comía de pie o fuera del comedor. 

Michael recordó el hecho que más le marcó su permanencia en la Esmil. Aseguró que el teniente lo obligó a zambullirse en una piscina helada. El joven se desmayó durante esta prueba. Sufrió hipotermia. (I)