El Gobierno británico también presionó al periódico estadounidense The New York Times para que destruyera copias de documentos filtrados por el extécnico Edward Snowden vinculados a las operaciones ilegales de ciberespionaje de la Agencia Nacional de Seguridad norteamericana (NSA) y de su homóloga británica, la GCHQ.
Las presiones fueron hechas a la editora ejecutiva del Times, Jill Abramson, de un alto funcionario de la embajada británica en Washington. El matutino estadounidense respondió “con silencio”, según fuentes allegadas al caso citadas por el periódico Daily Mail.
En un comunicado público, Alan Rusbridger, editor del periódico británico The Guardian, dijo que su periódico, que ya había enfrentado amenazas de posibles acciones legales por el gobierno del Reino Unido, se vio obligado a destruir el 20 de julio documentos filtrados.
Rusbridger afirmó que dos días después The Guardian informó a las autoridades británicas que materiales vinculados a operativos ilegales del GCHQ pasaron al New York Times. El editor de The Guardian agregó que “luego les llevó a las autoridades británicas tres semanas antes de que alguien del gobierno contactara al New York Times”.
Un portavoz de la Embajada británica en Washington no confirmó la información, aunque dijo que “no debe sorprender a nadie si contactamos a una persona en posesión de algunos de estos materiales”. (Leonardo Voix, corresponsal en Londres)