De acuerdo con un artículo de “The Wall Street Journal”, el FBI ha desarrollado sus propias herramientas de vigilancia parecidas a las que usan los “hackers” para recopilar información contra sospechosos. Supuestamente, el FBI creó algunos de estos instrumentos internos, mientras que otros fueron comprados.
El FBI “contrata a las personas que tienen habilidades de ‘hacking’, y adquiere herramientas que son capaces de hacer estas cosas”, dijo un exfuncionario de la división cibernética del FBI al diario norteamericano. La fuente también reveló que estas herramientas solo se utilizan cuando otros métodos de vigilancia no funcionan.
La tecnología más alarmante es una herramienta que supuestamente permite al FBI activar remotamente los micrófonos en los dispositivos Android. Una vez activado el micrófono, la oficina puede grabar conversaciones sin que el propietario del dispositivo lo sepa. Esta herramienta puede hacer lo mismo con los micrófonos de los laptops. Según el periódico, el FBI ha estado supuestamente trabajando con estas herramientas de hacking durante más de 10 años.
El FBI, además de contratar hackers,
ha comprado programas de piratas cibernéticos
El FBI tiene una larga historia de vigilancia de conversaciones en las computadoras y los dispositivos móviles. En 2002, la agencia colaboró con la policía en las escuchas telefónicas, y en 2004 reinició sus esfuerzos para mantener este programa en marcha.
La semana pasada se reveló que el FBI y la NSA estaban buscando desarrollar sus sistemas de vigilancia electrónica aún más. En nombre de estas agencias, el Gobierno de EE.UU. trató de obtener las principales claves que las empresas utilizan en Internet para proteger millones de comunicaciones internas.
El analista político Yusuf Fernández asegura que Estados Unidos, además de violar leyes internacionales, está recurriendo a prácticas de organizaciones piratas.
“Están asumiendo un papel de ilegalidad y adoptando las prácticas de grupos piratas”, señaló el activista en declaraciones al canal RT.
Estas declaraciones ocurren dos meses después de que Edward Snowden, extécnico de la CIA, revelara que la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) tiene acceso a compañías telefónicas y a empresas de Internet como Microsoft, Appel, Google, entre otras, para espiar las comunicaciones de millones de personas en todo el mundo.