El presidente de Ecuador, Rafael Correa, llamó el jueves a la guerrilla  colombiana de las FARC a deponer las armas y seguir el camino de la democracia,  señalando que la lucha armada perdió toda razón de ser.
"Es el momento histórico  oportuno para que las FARC depongan las armas, se integren a la vida política,  luchen por la vía democrática si es que quieren cambiar la realidad colombiana",  dijo el mandatario izquierdista en su informe semanal de labores, grabado este  jueves.
"Si alguna vez hubo gente que buscó la lucha armada para sacar de la  miseria, para lograr la justicia, ese objetivo ya no se va a lograr, en el siglo  XXI, por esa vía", advirtió. Correa dijo que el pasado lunes lo visitó la  canciller colombiana, María Angela Holguín, para darle la "extraordinaria  noticia" de la firma de un "documento marco" entre el gobierno de Juan Manuel  Santos y las FARC "para iniciar los diálogos por una paz definitiva".
El jefe de  Estado ecuatoriano subrayó que "es ahora o nunca que se puede logar la paz en  Colombia", e hizo votos para que las conversaciones exploratorias conduzcan  "definitivamente" a la pacificación del país vecino. "A estos grupos armados les  insisto: frente a una democracia, en el siglo XXI, esa ya no es la vía, no hay  salida (militar) a ese conflicto, lo único que va a costar es más sangre, más  muerte, más dolor, perjudicando a los que supuestamente se quiere ayudar",  remarcó el presidente.
Correa reiteró que el inicio de pláticas con la guerrilla  comunista "es de las mejores noticias de las últimas décadas en América", pues  es el "último conflicto armado que persiste en un país de la patria grande, que  lleva cerca de medio siglo, ya perdió su razón de ser y no tiene una salida"  armada.
El pasado lunes, Santos anunció que su administración lleva a cabo  "conversaciones exploratorias" con miras a un diálogo de paz con las Fuerzas  Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la guerrilla más antigua del  continente, y que se realizan sin interrumpir los operativos y la presencia  militar en todo el territorio colombiano.
		