Durante su visita este lunes a la nueva Unidad de Flagrancia de Quito, ubicada en las avenidas Patria y 9 de Octubre, el presidente Rafael Correa destacó el trabajo interinstitucional del sector justicia.

Explicó que en un mismo espacio físico se concentran todos los servicios judiciales, con el objetivo de resolver los delitos flagrantes y de contravenciones de forma ágil y oportuna.

Dijo que estas unidades son un ejemplo de que se pueden lograr "resultados extraordinarios", pues desde que esta unidad en Quito entró en funcionamiento, el pasado 29 de octubre, se ha calificado como delito flagrante a 437 detenciones de las cuales el 52% fue resuelto.

"En tres meses se hizo lo que antes demoraban años o no se resolvía nunca", puntualizó el Mandatario.

En este espacio el Estado invirtió 7,5 millones de dólares. Laboran 12 fiscales y 13 jueces entre juzgados de Flagrancia, Contravención y Tribunal Penal.

Cuenta con cinco salas de audiencias equipadas con tecnología de punta, además de áreas de atención médica y psicológica, trabajo social y asesoría, cámara de Gessell, entre otros.

También prestan sus servicios médicos, agentes de tratamiento penitenciario, psicólogos, defensores públicos y trabajadores sociales; quienes en horarios rotativos trabajan las 24 horas de todos los días del año.

Esta fue una de las últimas actividades del presidente Correa como Mandatario en funciones, antes de la licencia que por campaña electoral solicitó a la Asamblea. También tiene previsto realizar la entrega de un terreno para la estación del Metro sur de Quito.

En la mañana participó en la Ceremonia de Relevo de Guardia. Desde el balcón de Carondelet  presenció el acto que se lleva a cabo todos los lunes en la Plaza de la Independencia y saludó a los ciudadanos que se dieron cita en el lugar.