Durante el enlace  del sábado 7 de diciembre, el Presidente de  la República denunció que las ONG utilizan un manual para resistir y hacer revueltas, refiriéndose al texto Protegiendo a su comunidad contra las empresas mineras y otras industrias extractivas. Una guía para promotores/activistas comunitarios, publicado por Carlos Zorrilla y otros, en 2009.   

Al respecto, anotamos  un extracto de lo que el presidente Correa  dijo en esa ocasión y EL TELÉGRAFO recogió, en su edición del 8 de diciembre pasado:  “Se enseña cómo sentarse en una vía para obstaculizarla, hasta cómo conseguir apoyo internacional y plantear demandas y recursos legales que detengan proyectos. 

La hoja de ruta, en el numeral 31, indica: Abrumar a funcionarios, seguirlos constantemente, atosigarlos.  En el 32 dice molestar a funcionarios, repudio verbal. Lo que en el manual se llaman acciones de intervención no violenta. Asimismo pide la toma de edificios públicos. Acciones parecidas a las tomadas por los grupos que provocaron los disturbios en las afueras de la Ronda Petrolera, el pasado jueves 29 de noviembre”.

Las tomas pacíficas, han sido utilizadas  por comunidades bien organizadas en todos los continentes.
Respondiendo a la exigencia del señor Zorrilla para que este diario pruebe que algunas de las 14 estrategias, emitidas durante el enlace -sentarse en la vía para obstaculizarla, presiones a individuos, atosigar a las autoridades, molestar a funcionarios, repudio verbal, ocupaciones, dando vueltas en vehículos, toma de edificios públicos,  interrumpir el paso de autoridades, ataques, invasiones, posesión física de un lugar, llevar niños en brazos y utilizar a mujeres embarazadas-, constan en el texto del manual de su autoría, debemos señalar que en la página 19, bajo el subtítulo Acción directa, se lee que “pese a los riesgos, hay veces en las que la acción directa puede galvanizar a la oposición local, y puede convertirse en un símbolo poderoso de la resistencia. Bloqueos de los caminos de acceso, tomas pacíficas, huelgas de hambre y formas creativas de no cooperación han sido utilizadas exitosamente por comunidades bien organizadas en todos los continentes”.

Para ejemplos de acción directa no violenta, el manual direcciona a la  sección Recursos -que va de la página 28 a la 32, con varios links que remiten a ONG que asesoran en áreas como: fuentes de financiamiento,  estudios de impacto ambiental, defensa de derechos humanos, prácticas de resistencia no violenta, entre otros.   

En la página 31 del manual encontramos el enlace: Acción directa no violenta. Cómo preparar y organizar campañas y acciones MOC. www.noviolencia.org/publicaciones o www.revistafuturos.info/documentos/docu_f20/accion_directa.pdf).) que es un folleto elaborado por Paco Cascón y Carlos Martín Beristain del Movimiento de Objeción de Conciencia -MOC-.

En este folleto (página 9) con el subtítulo Preparación técnica: trabajo de cara a los medios de comunicación, se lee: “es necesario que los medios de comunicación de masas estén sensibilizados e informados y, por lo tanto, ‘predispuestos’ a abrirnos sus puertas para difundir nuestras causas”. Texto que coincide con lo anotado en el Manual (página 16) “Es esencial entender el poder de la prensa y la importancia de desarrollar aptitudes básicas para utizarla”. También hay similitud entre lo que propone el MOC (p.10) “La oportunidad o necesidad de contactar con otros grupos es algo que se debe plantear previamente, a la vez que conviene definir los criterios de actuación general y la línea que se llevará con cada grupo”. Y lo anotado en el manual de Zorrilla (p.12) “Forme alianzas con otras comunidades afectadas de la región”.  

Asimismo, en la p. 7 del folleto del MOC se describen algunas acciones de intervención no violenta: “ayunos, ocupaciones (con sentadas, simplemente quedándose, dando vueltas alrededor, con vehículos,...)”, que, aunque los autores del manual no las hayan anotado expresamente, solo basta que los hipotéticos promotores/activistas comunitarios hagan un clic en el link correspondiente para acceder a ellas.

Lea a continuación el texto Protegiendo a su comunidad contra las empresas mineras y otras industrias extractivas. Una guía para promotores/activistas comunitarios