La adquisición obligatoria del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) colombiano para internarse más allá del Municipio de Ipiales, en el sur de Colombia (frontera con Ecuador), genera molestias a conductores ecuatorianos que se movilizan por diversas rutas del vecino país y que desconocen la normativa.

Todo lo contrario ocurre con los viajeros colombianos, de acuerdo con Efrén Benavides, cónsul de Ecuador en la fronteriza Ipiales (Colombia). Cuando un  turista de ese país ingresa no sufre problemas ya que no es un requisito obligatorio adquirir el SOAT.

El ciudadano colombiano puede ingresar libremente con sus documentos personales y del vehículo a  la Zona de Integración Fronteriza (ZIF), que comprende las provincias de Esmeraldas, Carchi, Sucumbíos e Imbabura.

Sin embargo, los viajeros ecuatorianos que salen  de  la zona urbana de Ipiales con dirección a Pasto (más al norte) se topan con controles de la Policía de carreteras de esa nación que les solicita el SOAT.

Si no se posee el documento, se deberá pagar una multa que podría llegar a más de 600 mil pesos (aproximadamente $300) más el costo de traslado de grúa y pago de parqueadero de garaje, explicó el diplomático.

Un oficial de Policía de Ipiales señaló que el usuario debe cancelar la multa y adquirir el SOAT para poder continuar el viaje. “Todo depende de la rapidez con que cancele la multa y adquiera el documento para liberar el vehículo”, contó el uniformado que prefirió no identificarse.

Benavides aseguró que el mismo tratamiento que tienen los colombianos deberían recibir los ecuatorianos bajo el principio de reciprocidad. Lo ideal, agregó, sería que tampoco se exija como requisito el SOAT para que los ciudadanos se internen en la ZIF colombiana, que incluye a los departamentos de Nariño y Putumayo.

La particularidad que se vive en zona de frontera es que hay personas que viajan a Pasto por diversos motivos y les resulta oneroso comprar un SOAT que cuesta entre  50 mil o 60 mil pesos colombianos ($ 25 o $ 30), según el tipo de automotor, y dura un mes, además de que se activa un día después de haber sido adquirido.

Pero Daniela Amargo, representante de un punto de venta SOAT, ubicado a 30 metros del edificio de Migración de Colombia,  explicó que una vez que el usuario -en este caso un ecuatoriano- adquiere el documento, en el sistema aparece como ‘vehículo en tránsito’ y puede circular libremente, independientemente de que se active al siguiente día el seguro.

La empleada recordó que antes había quejas de ciudadanos que apenas lo adquirían eran retenidos por los miembros de la Policía colombiana. “Al parecer, algunos se querían hacer los vivos, pero últimamente no se ha tenido problemas”, acotó.

Los SOAT que esta aseguradora vende duran 3 meses con valores desde los 60 mil ($ 30), 80 mil ($ 40), 130 mil ($ 65) y 150 mil pesos colombianos ($75). Todo dependedel vehículo, año y cilindraje. Solo en diciembre, 121 extranjeros adquirieron el SOAT colombiano, de ellos, 80 fueron ecuatorianos.

Mientras que la aseguradora La Previsora S.A., ubicada en Almacenes Alkosto, en Ipiales, en promedio ha vendido -en lo que va de diciembre- 200 SOAT a ecuatorianos, con valores que van desde los 20 mil ($10) a 60 mil pesos colombianos ($ 30).

Información del requisito

Para que los ecuatorianos estén enterados de la normativa, Benavides dijo que se ha alertado por diversos medios a las personas de la obligación de comprar el SOAT colombiano.

Hay un efecto positivo en esto. Benavides señaló que ahora los ecuatorianos se quedan a comprar en su territorio. Además como los colombianos no tienen la necesidad de comprar el SOAT en la ZIF se fomenta el turismo. Hasta agosto de este año se registró el ingreso a Ecuador de 140 mil colombianos.

Pese a que habría un acuerdo de buena voluntad del Cabildo de Ipiales para que no se solicite SOAT a vehículos ecuatorianos, ese criterio  no es compartido por la Policía de carreteras, que tiene la disposición de exigir este documento en cualquier sitio, sin importar la nacionalidad. La normativa colombiana establece que todo vehículo nacional o extranjero que se interne en Colombia obligatoriamente debe poseer el SOAT.

Del caso ya conocen las autoridades para buscar alternativas y evitar que el ecuatoriano sea objeto de persecución por no tener este requisito en la ruta Ipiales-Pasto.

Para Luis Almeida, turista ecuatoriano, la medida es desconocida en Ecuador. Viajó desde Quito para ir de compras a Pasto, pero al enterarse de que debe adquirir nuevo SOAT se quedó en Ipiales.

Sugirió que las autoridades deberían efectuar algún convenio para que el SOAT ecuatoriano y colombiano sean homologados y puedan ser usados en ambos países.

DATOS

En el lado ecuatoriano hay una disposición de que, mientras no exista un punto de venta en Rumichaca (puente binacional), el ciudadano colombiano queda exonerado de portar el SOAT para ingresar al país.

Pasando la localidad de Ipiales la Policía colombiana ha establecido puntos de control ubicados en los sectores de Las Cruces, San Juan y El Cebadal, con dirección a la ciudad de Pasto.

Los conductores que no tengan el SOAT colombiano deben pagar una multa de 616 mil pesos colombianos ($ 279) que puede reducirse hasta en un 50% si se paga inmediatamente.

A la multa se suma el costo de la grúa que traslada el vehículo y que cobra de acuerdo con el kilometraje recorrido, así como el parqueadero, que cuesta 2.800 pesos colombianos ($ 1,22) por día, informaron las autoridades.

COMISIÓN RATIFICÓ TEXTO SOBRE PLAZO PARA EL SOAT

Con 8 votos a favor, la Comisión de Desarrollo Económico, en su informe no vinculante, se allanó a 4 de las 5 objeciones del Ejecutivo al proyecto de reformas a la Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, por cuanto se consideró que son aspectos de forma y no de fondo que mejoran la redacción del texto aprobado.

Los legisladores se allanaron al pedido sobre la contratación de servicios de transporte terrestre, el sistema público para pago de accidentes de tránsito, el fortalecimiento del sistema para la obtención de licencias de conducir no profesional Tipo B y el plazo para que el Servicio Ecuatoriano de Capacitación Profesional (Secap) obtenga la autorización de la Agencia Nacional de Regulación.

Además, ratificaron el texto aprobado por la Asamblea Nacional sobre el plazo de depuración de información y datos pertenecientes al Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT), y la estructuración de la plataforma tecnológica que permita el cobro de la tasa por concepto del servicio que se preste a través del sistema público.

El presidente de la Comisión de Desarrollo Económico, Juan Carlos Cassinelli, explicó que se resolvió mantener el texto aprobado por la Legislatura porque, tras la revisión de la objeción parcial, se detectó un aparente error en la escritura en el desarrollo del texto alternativo y en este punto se recomienda ratifi