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Correa recibe premio Rodolfo Walsh en Argentina
Florencia Saintout, decana de la Facultad de Periodismo de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), entregó este martes al mandatario ecuatoriano, Rafael Correa, el premio Rodolfo Walsh.
"Lo recibo en nombre del pueblo ecuatoriano y es reconfortante, porque gracias a Dios hay eco en esa lucha contra esos negocios dedicados a la comunicación que nos quieren privatizar hasta ese derecho", manifestó el Jefe de Estado tras recibir el galardón.
El acto se desarrolló en la sede universitaria, localizada a 40 kilómetros al sur de Buenos Aires.
La resolución del Consejo de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP destaca que "Rafael Correa es uno de los referentes actuales en la batalla contra la voluntad hegemónica que pretende encorsetar la palabra y, a través de ella, a los sujetos individuales y sociales" .
En su discurso, el Jefe de Estado ecuatoriano recalcó la importancia de la lucha contra la privatización de la comunicación, "que es un derecho, algo que nadie se los puede quitar".
"Gran parte de las decisiones que tomamos para nuestras familias, para nuestros negocios, lo que opinamos de supuestos hechos de la vida nacional e internacional, dependen de lo que nos digan o callen un puñado de medios de comunicación", sostuvo Correa.
"Aunque este es un problema planetario, en Latinoamérica -dado los monopolios de medios, su propiedad familiar, sus serias deficiencias éticas y profesionales y su descarado involucramiento en política-, el problema es mucho más serio", añadió.
El Mandatario señaló que "han tenido la habilidad de identificar negocios dedicados a la comunicación con la libertad de expresión y la crítica a estos negocios, como oposición a dicha libertad".
"Esto es tan absurdo como decir que criticar al Presidente es oponerse a la democracia. Lamentablemente, todavía hay mucha gente que compra este discurso", puntualizó.
Correa recordó que en Ecuador, los medios de comunicación escritos a nivel nacional son propiedad de media docena de familias.
"La práctica generalizada era ser un emporio económico y luego invertir en medios de comunicación, no para informar, sino para defender los intereses del emporio". Así mencionó el caso de la familia Isaías, "que poseía un grupo de más de 200 empresas, entre ellas el banco más grande del país, dos canales de televisión en señal abierta y uno por cable, el propio servicio de televisión por cable, tres radios regionales y varias revistas".
También dijo que estos negocios pretenden que hay que "tolerar las mentiras en nombre de la libertad de expresión"..
"No somos intolerantes con la prensa, somos intolerantes como debemos serlo con la mentira, la corrupción, mediocridad, mala fe. Y en América Latina la prensa miente, amparándose en la libertad de expresión, confunde información con opinión y cree que cuestionar es engañar", apuntó al añadir, además, que "su involucramiento en política es descarado".