En la Amazonía existen 249 pistas de aterrizaje, de éstas 30 están por validarse como lugares seguros, aseguró Deysi Ortiz, coordinadora de Pistas del Instituto para el Ecodesarrollo Regional Amazónico (Ecorae), quien agrega  que se prevé concluir con todo el inventario hasta septiembre. Con los resultados que se obtengan se establecerán los proyectos de intervención de las pistas aéreas, que sirven a cerca de 189 parroquias de la región amazónica.

Las pistas ya están ubicadas en el sistema cartográfico del país, a través de la DAC; el siguiente paso será cruzar la información para establecer la necesidad de mantenerlas en funcionamiento, aseguró la funcionaria. 

Con el censo de pistas se logrará crear parámetros de control y manejo de todas las áreas de aterrizaje y despegue; además, se pavimentarán las pistas de acuerdo con la demanda.             

En la Amazonía diariamente se realizan 18 vuelos  como parte de los proyectos de asistencia comunitaria que maneja el Gobierno a través del programa de Transporte Aéreo Económico (TAE). La meta es transportar 24 mil pasajeros por año, esto representa el 50% de la demanda actual del servicio de transporte aéreo en esa región.         

Para este tipo de vuelos, la población debe cubrir valores mínimos para la transportación de pasajeros, víveres y  emergencias. El costo es de $ 15 para adultos y $ 7,50 para niños y personas de la tercera edad. El ahorro es por pasajero de $60.    

El 80% del valor del pasaje es cubierto por el Estado. Las rutas habituales parten desde Shell (Pastaza) hacia Taisha, Montalvo, Curaray; y desde la ruta de Macas (Morona Santiago) se dirigen hacia Tutinentsa y Tena.  Un vuelo privado  varía entre los $300 y $ 500, dependiendo de la compañía de transporte.  

Carlos Viteri, presidente del Ecorae, aseguró que es importante desarrollar proyectos de transporte para las comunidades amazónicas. Un viaje que en avión puede representar entre 30 minutos a una hora, a través de la vía fluvial o terrestre puede durar varias horas e incluso días.

En estos aeropuertos el mayor inconveniente se presenta en Taisha (Morona Santiago), donde es necesaria la rehabilitación de la pista, la plataforma, nueva terminal y torre de control.