Publicidad

Ecuador, 28 de Marzo de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Los vendedores de monigotes se ubican en la ciudadela Bellavista

Los vendedores  de monigotes se ubican en la ciudadela Bellavista
29 de diciembre de 2011 - 00:00

Varios comerciantes de diferentes tipos de “años viejos” se encuentran ubicados a lo largo de varias cuadras de la Avenida Bellavista, al pie del parque de esta ciudadela, en el noroeste de la ciudad, desde comienzos de esta semana, cuando faltan pocos días para la tradicional quema de los monigotes, la noche del próximo 31 de diciembre.

Estos muñecos,   elaborados de aserrín,  cartón,  papel y con un esqueleto de madera, actualmente ocupan toda la acera por donde normalmente pasan los peatones.

Los comerciantes consultados por este medio señalan que para ellos es una tradición  asentarse allí para comerciar el producto, pese a que no cuentan con la autorización del Municipio de Guayaquil, ente que en días pasado impidió la venta de artesanías navideñas en la explanada del Estadio Modelo Alberto Spencer a otro grupo de vendedores.

Entonces,  Xavier Narváez, director de Justicia y Vigilancia, expresó a medios locales que la explanada “no era propicia” para el comercio de artículos navideños, entre los que también se encontraban monigotes.

En un operativo que personal  del Departamento de Control de Armas de la Armada Nacional  realizó en el improvisado espacio decomisó camaretillas y fuegos artificiales, que estaban guardados en una zona cercana a una gasolinera.

En el lado izquierdo de la vía se encuentra Manuel Arias, un comerciante de 44 años, que se dedica a vender monigotes desde hace 5  en este sector.

“Tengo muñecos de todos los precios, desde $5, según el tipo, materiales de elaboración, tamaño.  El más caro que tengo es el de $25 y se trata del vaquerito, uno de los personajes de Toy Story”, sostiene.  

Raúl Bodero es otro vendedor que desde hace varios años llega a este sector desde la 29 y la D,  suroeste de la ciudad, a comercializar sus “años viejos”.

“Este año los que más salida han tenido son Los Pitufos y Chucky, el muñeco diabólico”, explica.  Según dice, el comercio ha tenido un buen ritmo en lo que va de esta semana, la última del año. 

“Acá la gente siempre deja todo para el último, entonces el negocio se pone mejor las últimas horas del último día del año”, indica el comerciante.

Freddy Valero es un joven morador de la ciudadela Alborada, que llegó la mañana de este miércoles en búsqueda de un monigote.

“Es verdad que por donde vivió también se venden años viejos, pero siempre hemos comprado en este sector con mi papá por la tradición familiar”, dijo el comprador.

Contenido externo patrocinado