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Técnico explica que aún no es necesario trasladar la embarcación grande

Dragados se efectuarán, al mismo tiempo, en dos puntos del cantón

La draga Río Yanunkay (i), que tiene dos brazos de succión, recibe mantenimiento. Trabajará con 36 personas. Mientras que de una zona cercana al islote El Palmar (d) se extrae el material necesario para el relleno hidráulico. Fotos: El Telégrafo.
La draga Río Yanunkay (i), que tiene dos brazos de succión, recibe mantenimiento. Trabajará con 36 personas. Mientras que de una zona cercana al islote El Palmar (d) se extrae el material necesario para el relleno hidráulico. Fotos: El Telégrafo.
24 de abril de 2014 - 00:00 - Redacción Guayaquil

El dragado del Canal de Acceso al Puerto Marítimo de Guayaquil y del islote El Palmar son 2 gestiones estatales que se encuentran en su fase inicial.

La draga Río Yanunkay, que arribó el pasado sábado desde China y adquirida por la Dirección de Intereses Marítimos de la Armada Nacional, se encargará de eliminar, de forma masiva, la sedimentación del Canal de Acceso al Puerto de Guayaquil (no incluye la zona los goles).

Desde finales de este mes, la maquinaria, de 7.000 m3 de capacidad, comenzará los trabajos. “Los residuos serán llevados a una zona de Posorja”, explicó, en un recorrido por la embarcación, Carlos Díaz, teniente de Navío de la Armada.

La nave, señaló, será sometida a un mantenimiento inmediato. Posteriormente, será enviada a las boyas 43 y 44, zonas en las cuales hay alta concentración de sedimentos (los tramos más complejos van desde la 37 hasta la 52). Actualmente, la draga Francisco de Orellana, de 1.500 m3 de capacidad, que trabaja paralelamente, se encuentra en las boyas 38 y 40.

Yanunkay tiene 2 tubos que pueden descender hasta 30 metros de profundidad con los cuales extrae el material que se removerá. “Tiene 2 plumas para hacer trabajos de mantenimiento y cuenta con 2 motores de propulsión (hélices)”, detalló Díaz.

La intervención, que busca mejorar la navegación de las embarcaciones, pretende dejar el canal de acceso a 9,60 metros de profundidad en marea baja.

En 2003, una draga holandesa, de mayor capacidad, realizó trabajos similares en el área, durante 6 meses, sin embargo, al siguiente año se concentró el limo en el lugar. Por ese motivo, posteriormente a la gestión actual, habrá trabajos de mantenimiento.

Actualmente, en otro sector del río Guayas, se desarrolla la primera fase del dragado del islote El Palmar. Para ello, se construye una cama de transferencia de carga perimetral, trabajo que se efectúa utilizando una draga con una tubería de 10 pulgadas de diámetro.

Según Ángel Velasco, jefe de proyecto -por parte de la Armada- del dragado en el río Guayas en El Palmar, entre el islote y La Puntilla, la mencionada maquinaria es la única que se requiere -en este momento- para colocar la estructura previa a la instalación de geotubos alrededor del islote.

En repetidas ocasiones, el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, ha cuestionado el proceso de avance de la obra, a tal punto que ha calificado a la Macas, por sus dimensiones, como ‘cáscara de nuez con sorbete’.

Al respecto, el técnico de la Armada explicó que la draga de mayor tamaño debe estar en el lugar cuando se culmine la colocación de los geotubos. “De acuerdo con las recomendaciones de los estudios, se debe esperar 5 meses para que se consoliden. Luego llega a trabajar la nueva draga, de mayor capacidad, para hacer el relleno hidráulico. Sería una pérdida de recursos tenerla parada ahora”.

Las labores de la primera fase, inicialmente, estaban contempladas en 16 meses. Luego se amplió el plazo. La obra ha avanzado el 20%. Entre mayo y junio de 2015 culminará la mencionada etapa, según lo establecido en el convenio interinstitucional entre la Secretaría Nacional del Agua (Senagua) y la Prefectura del Guayas.

Los trabajos comenzaron en octubre de 2013, pero la obra fue paralizadas porque hubo problemas para instalar los geotubos, los cuales se hundían. La explicación técnica fue que “existen capas superficiales de arcilla con características geomecánicas diferentes a las evaluadas en las zonas centrales del islote en la época de los estudios originales”.

Luego, la consultora definió un procedimiento para subsanar el problema presentado. Así, se recomendó la colocación de la cama de transferencia de carga. El año pasado se conoció que en la segunda fase se prevé retirar 3,5 millones de m3 de residuos, en 4 años. Los sedimentos que se draguen en lo posterior servirán para implementar el relleno hidráulico en los sectores Durán y Guayaquil.

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