Estar en forma es una tendencia. Algunas personas hacen dieta, van al gimnasio o combinan ambas actividades. También hay quienes toman suplementos para desarrollar masa muscular.

El consumo de la sustancia, según especialistas, es esencial ya que contribuye a la formación, crecimiento y reparación de los órganos corporales.  Los alimentos que la contienen son de origen animal.

Los batidos que se consumen después del entrenamiento constituyen una fuente de proteína. No obstante, el consumo en exceso ocasiona problemas de salud.  

Un deporte conocido es el crossfit, pero se conoce que sus ejercicios son distintos a los del gimnasio. Las personas que consumen proteínas deberán hacerlo de forma diferente.

Roberto Orellana, entrenador del espacio de crossfit Evolution Box, comenta que solo ha consumido el nutriente de soya, aunque considera que no tiene buen sabor. “Me ayudaba en mi rendimiento físico”. Aunque solo las tomó por corto tiempo, dice no haber sufrido ningún efecto secundario.

En la actualidad no consume ningún tipo de proteínas, y aunque dice que le ayudan en cierta forma, aconseja que tomen productos naturales y se cuiden en las comidas.

Silvia Alejandro, especialista en nutrición y profesora de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo, habla sobre el debido consumo de proteínas y sus consecuencias. “Las personas creen que porque van al gimnasio son deportistas e ingieren gran cantidad de comida; están totalmente equivocados”.

Un deportista -añade- no debe comer más proteínas, pues el alimento del músculo es el carbohidrato, el cual está listo para ser utilizado y provee de energía.

Un deportista -continúa la especialista- tiene hipertrofia muscular porque se agranda. “Pero es peligroso comer en exceso proteínas porque generan demasiados elementos como parte de su proceso metabólico”.

Alejandro dice que muchas personas deciden hacer cualquier dieta que le aconsejan o buscan en internet. “La dieta es única y debe estar ligada a las condiciones de cada persona, tiene que ir acorde con la edad, peso, condiciones fisiológicas y estado de salud”.

La dieta hiperproteica consiste en consumir alimentos ricos en proteínas, reduciendo la ingesta de azúcares y grasas. La principal ventaja es que produce una rápida pérdida de peso. Pero solo es aconsejada máximo 2 meses y la persona que la realiza debe ser asesorada.