El próximo miércoles, el presidente de Macará, Miller Salazar, y tres futbolistas de El Nacional -Édder Fuertes, Johan Padilla y Ángel Gracia- deberán asistir a la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) para rendir su versión sobre el supuesto intento de soborno que los involucra.

La Comisión de Disciplina de la FEF los convocó, luego de que se abrió un expediente por los audios que circularon al inicio de la semana. En ellos, Salazar habla con un intermediario, quien le ofrece llegar a un acuerdo con futbolistas de El Nacional para que no rindan a su nivel.

La FEF actuó de oficio en este caso, pues el caso es de dominio público y no es necesario una denuncia formal para iniciar las investigaciones del caso.

La mayor pena a nivel deportivo, según los estatutos de la Ecuafútbol, que podría recaer sobre el directivo sería de cinco años fuera de la actividad. El club podría perder la categoría si se confirma la ilegalidad.

El partido entre ambos se disputó el lunes 8 de octubre en el estadio Bellavista de Ambato, con marcador de 2-2. El visitante se puso por delante 0-2, pero luego los ambateños igualaron.

El abogado de Macará, Orlando Salazar, indicó que los días posteriores al partido, el presidente del club recibió llamadas de Genaro C. -el intermediario- para presionar al directivo acerca del resultado conseguido.

“Al haber superado un 2-0 en contra, él se atribuye que el resultado se dio por el trabajo que hizo con la gente de El Nacional. En función de eso solicita una cantidad de dinero”, aseguró Salazar.

El elenco ambateño presentó la denuncia el día después, el 9 de octubre, en la Fiscalía de Tungurahua por extorsión.

Genaro C. indicó en entrevista con radio La Redonda que el soborno sí se consumó y que tiene pruebas de aquello. La próxima semana será la audiencia en la Fiscalía de Tungurahua, donde presentará las pruebas a través de su abogado.

Dijo poseer una grabación de una llamada con un futbolista de El Nacional, como el mayor respaldo para su defensa. Aquello también lo presentará en la Fiscalía.

Sobre eso, Salazar señaló que ese material sería generado por el propio Genaro C., por lo que no existe preocupación en la defensa del equipo ambateño.

Ayer, el directorio de la Liga Profesional se reunió para tratar el tema y definir su postura en el tema. Antes de la reunión, Jaime Estrada, miembro del directorio, indicó que se llegará a las últimas consecuencias para que la verdad salga a la luz.

Mientras que Mauricio Arosemena, asesor jurídico de la Liga Pro, fue cauto sobre el asunto y mencionó que se expondrán las normativas aplicables para el caso, para que el comité ejecutivo tome una decisión.

El año pasado sucedió un hecho similar, en el que se vinculó al club Orense de la segunda categoría -hoy en la serie B- con un amaño de un partido contra Chacarita.

Se presentaron supuestos audios del presidente Darwin Palacios, que tras las pericias respectivas se determinó que era otra persona y no el directivo. Estuvo vinculado Genaro C., según Palacios, que entabló vínculos con el club al ofrecer generar publicidad para el equipo.

“Llegamos hasta las últimas consecuencias para dejar limpio el nombre del club. Esta persona es un estafador. Le ha hecho mal a muchos clubes y con la mala experiencia que tuvimos, lo sabemos bien”, dijo Palacios, quien estuvo presente en la reunión de directivos en la Liga Pro, ayer.

Genero C. indicó que estuvo vinculado a unos 25 partidos en el balompié nacional, en los últimos cuatro años. Reveló que por partido se podía cancelar entre $ 15.000 y $ 50.000.

La próxima semana continuarán las investigaciones y declaraciones de los implicados, tanto en la justicia deportiva como en la justicia ordinaria, para definir las sanciones o no a dirigentes y futbolistas. (I)

Documento Oficial #LigaProEC: Resoluciones del Comité Directivo. pic.twitter.com/oVegn08a6y

— Liga Profesional de Fútbol del Ecuador (@LigaProEC) 18 de octubre de 2018