Los hinchas de Liga de Quito celebraron la atajada de Alexander Domínguez como si se hubiera tratado de un gol a favor de su equipo. El grito eufórico y los aplausos que se escucharon ayer al minuto 58 en Casa Blanca dimensionaron la importancia de la jugada.              

Con esa estirada hacia el palo derecho de su arco, ‘Dida’ no solo impidió que Christian Suárez marque y que se acaben los 17 años de imbatibilidad del estadio Casa Blanca, sino que también cortó la intención del equipo ‘canario’ de acercarse a Independiente del Valle, puntero del campeonato y que ayer también empató ante Emelec en Guayaquil.   

Pero el empate sin goles perjudicó también al equipo ‘albo’, que se quedó en tercer lugar con 34 puntos y que en la próxima fecha del torneo enfrentará a los del Valle, rival directo en el camino hacia la final. El equipo ‘amarillo’ sumó 36 puntos, es segundo en la clasificación y se mantiene a 5 puntos de distancia del líder.                   

El empate indiscutiblemente no es útil para ninguno de los dos equipos, más aún considerando que restan 4 fechas para que finalice la etapa. Desde ahora -más que en las fechas anteriores- Barcelona y Liga de Quito no solo dependen de sus resultados, sino también de una caída de Independiente.   

El penalti errado del ‘Chivo’ Suárez y la equivocación de Ely Esterilla minutos después cuando, en lugar de pasarle la pelota al delantero argentino Ismael Blanco, decidió rematar, fueron determinantes para Barcelona. El zapatazo de Néicer Reasco que se estrelló en el poste en el primer tiempo pudo haber representado una ventaja para Liga, pero nada pasó más allá del empate.

La iniciativa le correspondió a Liga desde el inicio. Diego Morales junto a los juveniles Hansel Batalla y Jefferson Intriago fueron los más peligrosos en el ataque y lejos de aportar como lo ha hecho, Juan Luis Anangonó estuvo bien marcado por Luis Checa y Franco Peppino.

El mediocampo de Barcelona no podía controlar los ataques de los ‘blancos’, que también se gestaron por las bandas con Néicer Reasco y José Madrid. Así llegaron varias ocasiones para Liga que no se concretaron, como el remate de Reasco, un error en la salida de Banguera que terminó con un mal remate de Intriago y un cabezaso del ‘Cachete’ Morales que fue desviado.

El DT ‘torero’, Rubén Israel, apostó por el juvenil Álex Ayoví, que sumó su segundo juego en el año. En el ataque fue poco aporte y tuvo en sus pies la única opción clara para Barcelona en la primera parte, pero en su intento le erró al balón.

En la segunda mitad, Barcelona mejoró notablemente con el ingreso de Ely Esterilla y Christian Suárez, para acompañar a Ismael Blanco en la ofensiva. Eso provocó que Liga tome más recaudos defensivos y ya no estuvo tan cómodo. 

En su primera oportunidad, Esterilla comandó un contragolpe, enganchó hacia el centro y remató de zurda, pero Alexander Domínguez consiguió despejar.

Liga también elaboró con velocidad los contragolpes, de la mano de Morales, que tuvo oportunidad de definir frente a Banguera, que contuvo seguro. Liga tuvo una más en el final, pero Juan Luis Anangonó no controló bien el balón y eso provocó que dispare fuera. Aún quedan 12 puntos por jugarse y tanto Liga como Barcelona esperan el milagro.