Los recuerdos de hace cuatro años afloran en las memorias de las seleccionadas nacionales. La Copa América de Ecuador hace cuatro años puso las bases para acceder al primer Mundial, un hito en la historia del fútbol femenino local.

Muchas de las protagonistas de aquella gesta se vuelven a unir para intentar cumplirla nuevamente. En abril se jugará la Copa América de Chile, clasificatoria para el Mundial de Francia de 2019.

La diferencia entre aquel equipo y el actual es la experiencia. En esta selección están siete que actúan en el exterior, algo que hace cuatro años era inimaginable.

Angie Ponce (Monroe Collegue, Estados Unidos), Ligia Moreira (Patriotas Boyacá, Colombia), Mayra Olvera (Patriotas Boyacá, Colombia), Kerly Real (Málaga, España), Ámbar Torres (Universidad Río Grande, Estados Unidos), Andrea Vera (Universidad Río Grande, Estados Unidos) e Irene Tobar (Real Cartagena, Colombia) serán el aporte de futbolistas que llegan desde el extranjero.

A pesar de que todas coinciden en que el fútbol femenino en el país no ha alcanzado un mejor nivel por la falta de una liga profesional, ellas consiguieron ser consideradas como foráneas.

Ahora, con esa experiencia, sumada a la actuación en el Mundial de Canadá 2015, irán con mayor confianza al torneo chileno. El objetivo se repite: conseguir de nuevo el boleto a un Mundial.

Hace cuatro años aquello fue más dramático. En la última fecha del cuadrangular final, Ecuador remontó un 2-0 contra Argentina para lograr el cupo al repechaje. Después se enfrentó a Trinidad y Tobago en dicho lance y accedió a Canadá.

“Existe una base de jugadoras que han hecho un gran recorrido con la selección y ahora tienen más conocimientos. Son pilares por la experiencia que han conseguido y sirve mucho para armar esta selección”, dijo la DT Wendy Villón.

Para ella, la Copa América será el mayor desafío en su carrera. Ella fue nombrada entrenadora para este nuevo proceso en lugar de Vanessa Aráuz, que se hizo cargo de los equipos juveniles femeninos (sub-17 y sub-20).

Las futbolistas que actúan en el exterior llegarán el jueves para la concentración definitiva antes del viaje a Chile. Por ahora solo Vera está con sus compañeras en la concentración.

“Hemos trabajado fuerte todo este tiempo y tenemos un reto más grande que el anterior. Tenemos una responsabilidad grande con el fútbol femenino del país”, dijo la guardameta, que cursa la carrera de Deportes en la universidad norteamericana.

Para ella representa un gran beneficio que se conozcan bien entre muchas de ellas, pero considera que nuevas futbolistas brindarán frescura a la plantilla. Su experiencia en Estados Unidos ha representado un valor agregado para su carrera.

“El fútbol allá es más rápido. He jugado con seleccionadas de México, Costa Rica y Estados Unidos y eso es mucho para mí. Quiero aportar todo lo que he aprendido”, agregó la compatriota.

Entre las nacionales que repetirán en la Copa América está la volante Valeria Palacios. Ella, como mundialista, considera que el bagaje que ha conseguido en los últimos cuatro años será importante para la competición.

“Mentalizamos a las nuevas chicas de que podemos llegar nuevamente al Mundial. Se puede hacer con ímpetu y mucho trabajo. Más que presión, existe mucha motivación”, explicó la jugadadora de Unión Española. A inicios de abril, la plantilla viajará a Chile para buscar una nueva clasificación.

Copa América

- Dos posibles sistemas. La entrenadora Wendy Villón pretende que su equipo se muestre ofensivo en el torneo, pero aún no define el sistema táctico que usará. Las opciones se reducen a dos: el 4-5-1 para priorizar el mediocampo o el 4-4-1-1, con enganche.

- 26 partidos se jugarán en la Copa América de Chile, entre la fase de grupos y el cuadrangular final.

- Clasificatorio a torneos. La Copa América es la competición más importante para las selecciones femeninas. Además de otorgar el boleto para el Mundial es clasificatorio a Tokio 2020 y a los Panamericanos de Lima 2019. (I)