El club quiteño Ñañas, que disputa la Superliga Femenina de Fútbol, anunció este lunes el fichaje de la delantera colombiana Karen Páez, quien llega procedente de Millonarios.

La jugadora bogotana inició su proceso deportivo en la escuela con tan solo siete años, y como la mayoría de jugadoras que se enamoraron del fútbol, sus primeros rivales fueron hombres.

Para sorpresa de muchos, la primera posición de la delantera fue como guardameta: “En el colegio me encantaba tapar, pero como era tan pequeña no me tomaban en serio, entonces empecé a jugar de lateral”, cuenta la futbolista.

Después de medir sus habilidades por diferentes posiciones, logró encontrar una en la que se sintió cómoda: “Un día en un partido con Gol Star, me pusieron como delantera e hice tres goles, desde ahí comencé a jugar de delantera”, relató Páez.

El primer acercamiento al fútbol femenino, Karen Páez lo vivió con la Selección de Bogotá, donde compartió con grandes figuras de la Selección Colombia como Orianica Velásquez y las gemelas Tatiana y Natalia Ariza: “Era un honor estar ahí, la mayoría de ellas tenían 17 años y entrenar a su lado fue maravilloso”.

Dejando atrás el proceso de Selección Bogotá, la delantera llegó al Club Gol Star en el 2008: “Entrenaba al otro extremo de mi casa, tenía muchas dificultades para llegar a los entrenamientos, era un camino larguísimo y peligroso pero era lo que yo quería”. Nueve años después (2017), el equipo capitalino formó una alianza con el Cúcuta Deportivo para jugar la primera edición de la Liga Femenina. “Se logró un buen plantel, había una armonía impresionante, reímos, lloramos, nos exigimos pero no se cumplió el objetivo”. En esta edición logró ser goleadora del equipo con 10 tantos anotados.

Al terminar esa primera temporada jugando para el equipo del Norte de Santander, Páez llegaría al Atlético Huila, donde alcanzó el título de la Liga Femenina: “El gran triunfo fue gracias a la constancia, le apostaron al proceso y eso se vio reflejado, logramos superar los altibajos que se presentaban”, declaró.

Después de finalizar su proceso con el equipo opita, Karen Páez tuvo la oportunidad de ir al fútbol extranjero: “El fútbol en Finlandia tiene un estilo completamente diferente, fallaron en muchas cosas y decidí devolverme para Colombia”.

Ese pequeño paso por Europa le dejó grandes enseñanzas: “Eso te ayuda a seguir trabajando, empiezas a encontrar las falencias en ti misma”.

Para el 2019 se dio la llegada de la delantera a Millonarios y para ese primer partido del torneo femenino, el equipo albiazul hacía su debut frente a Equidad, encuentro donde la bogotana sufrió un esguince de tercer grado: “Fue un momento difícil, sentí que se acababa la Liga para mí”.

Todas estas experiencias en el balompié, le aportaron mucho a la artillera albiazul en el tema académico.  “Nunca tuve la mentalidad de estudiar más allá de jugar fútbol […] gracias a la Universidad Sergio Arboleda (SE) me dio la oportunidad, estoy estudiando dirección técnica de fútbol”, aseveró la futbolista.

El club Ñañas es uno de los mejor organizados de la Superliga Femenina. Pese a la emergencia sanitaria por el coronavirus, la plantilla y el cuerpo técnico han cobrado sus sueldos a tiempo. Tampoco hubo rebajas de salarios.

El equipo volvió a los entrenamientos hace dos semanas después de realizarse las pruebas covid, tal como lo establece el protocolo aprobado por el COE Nacional para el reinicio de las prácticas. 

“Estoy contento porque el club ha sabido estar a la altura, creo que incluso en los equipos masculinos faltó mucho de lo que tiene Ñañas. La organización para buscar recursos y cumplir con las jugadoras y cuerpo técnico” es única, enfatizó Francisco Ramírez, director técnico del vicecampeón de la Superliga 2019. (I)