“Yo era testaferro de Julio Grondona”, aseguró el empresario futbolístico Patricio Gorosito (foto), uno de los 5 procesados por el caso de tráfico de drogas Carbón Blanco. La prensa argentina se hizo eco de esta revelación sobre el fallecido exvicepresidente de la FIFA, cuyos procedimientos dirigenciales también son investigados por la justicia de los Estados Unidos.

Gorosito, de 67 años,  era agente de jugadores (llegó a manejar 108) y está acusado de liderar una asociación ilícita para el contrabando de cocaína a España y Portugal.

El hombre, que se califica como amigo personal de Grondona, fue apresado en 2012 en Barcelona por el contrabando de más de 1.000 kilos de cocaína al Viejo Continente en la causa conocida como Carbón Blanco, según describe el diario La Nación.

Las autoridades argentinas sospechan que el fútbol habría sido uno de los canales por donde la plata del narcotráfico circuló para “limpiarse”.

Esta indagación relacionada al exlugarteniente de Joseph Blatter se une a la que desarrolla el Departamento de Justicia norteamericano, que tiene indicios de que Grondona, en su calidad de presidente de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), junto a los presidentes de la Conmebol y la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), habría recibido $ 15 millones por sobornos de la empresa Datisa para adjudicarse la transmisión de las ediciones 2015, 2019 y 2023 de la Copa América, y de la Copa América Centenario en 2016.

Las averiguaciones de actos de corrupción de miembros de la FIFA continúan su rumbo, así como las de las fiscalías de varios países sudamericanos. (I)