Independiente del Valle sub-20 logró repetir lo que sus pares del equipo principal consiguieron en 2016: llegar a la final de la Copa Libertadores de América.

Esta vez el equipo ecuatoriano lo hace en el torneo juvenil, tras derrotar 3-2 a River Plate de Uruguay y jugará la final, este sábado (14:30), contra Nacional uruguayo.

El encuentro en el mítico estadio Centenario de Montevideo estuvo cargado de emociones, sobre todo en el segundo tiempo.

En la primera parte, Independiente se pudo poner en ventaja a los 40’ con un gol del volante Renny Jaramillo. Ese fue el único tanto de la primera mitad; los cuatro goles restantes llegaron en el complemento.

Los uruguayos remontaron el marcador en dos minutos: primero anotó José Neris (51’) y Facundo Vigo (53’). Aquello parecía que no cambiaría, pero los ‘rayados’ mantuvieron la calma para elaborar su juego.

Así, llegó el tanto del empate a los 73’, obra de Gonzalo Plata y solo dos minutos después, Jaramillo marcó su segundo gol de la noche, que sería el del triunfo.

El árbitro central decretó cinco minutos de adición, en los que River Plate se lanzó al ataque, mientras que Independiente tuvo una oportunidad en el contragolpe que no pudo concretar.

Cuando el juez pitó el final, los jugadores uruguayos se la tomaron con Ángelo Preciado y lo persiguieron por la cancha. En un acto insólito, el jugador ecuatoriano tomó el banderín del tiro de esquina y amenazó a sus rivales.

Sin embargo, las cosas no pasaron a mayores y los cuerpos técnicos de ambas escuadras lograron controlar a sus futbolistas.

“Se nos complicó más de lo que pensamos y pagamos caro las desconcentraciones atrás. Hubo una remontada importante para lograr la clasificación y celebramos con algarabía en el camerino, un poco empañado por los hechos al final del partido”, comentó el DT Juan Carlos León.

Para él, su equipo no estuvo fino en la definición, pues gozaron de varias oportunidades claras para ampliar la ventaja.

Otro aspecto que complicó el partido fue el cambio de sistema en la segunda mitad, cuando decidió sacar al amonestado Jordan Rezabala. Con la desventaja en el marcador, a su equipo le costó hacer su juego, pero luego de 10 minutos reaccionó.

“Tenemos un cuerpo técnico de siete personas y analizamos de forma minuciosa a cada rival. Ya enfrentamos a Nacional en la fase de grupos (empate sin goles) y esperamos celebrar el primer título de Libertadores para Ecuador”, agregó el estratega.

Independiente del Valle es el único equipo ecuatoriano que ha participado en el certamen juvenil, en sus cuatro ediciones. Solo en la primera, de 2011, superó la fase de grupos y accedió hasta los cuartos de final, donde cayó contra Universitario de Perú por 3-0. (I)