Francisco Zambrano Campuzano, presidente del Comité Ecuatoriano de Derechos Humanos y Sindicales (Cedhus), presentó una denuncia por enriquecimiento ilícito contra Luis Chiriboga Acosta, presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF). Hasta el mediodía de ayer, este medio intentó comunicarse vía telefónica con el activista, pero no lo consiguió.

No se conoce si la acción judicial de Zambrano está ligada a los casos de sobornos y lavado de activos que indaga el Departamento de Justicia de los Estados Unidos y que involucra a directivos de la Federación de Fútbol Asociado (FIFA), pero se registró en la Fiscalía del Guayas el pasado martes (2 de junio), día en el que el fiscal general de la Nación, Galo Chiriboga, dijo que no conocía aún sobre denuncias en contra del titular de la Ecuafútbol relacionadas con los mencionados temas.

Ni siquiera Luis Chiriboga sabía sobre esta denuncia, así lo dijo ayer tras una rueda de prensa en la que apoyó la medida de Galo Chiriboga de pedir información a la Fiscalía norteamericana respecto a la participación de la Ecuafútbol en los casos especificados. “Es un posible tema de lavado de activos”, expresó el Fiscal General al detallar en qué consistirá la intervención.

Los informes de la Oficina Federal de Investigaciones de los Estados Unidos (FBI), aluden a la FEF y al resto de federaciones sudamericanas, así como a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), en un reparto de 310 millones de dólares por los derechos comerciales a escala global y exclusivos de 4 ediciones de las Copas América: 2015, 2019, 2023 y de la Centenario, en 2016.

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La empresa que habría entregado ese dinero es Datisa, creada el 21 de mayo de 2013 fruto de la fusión de Torneos, cuyo representante era el argentino Alejandro Burzaco; Full Play, de los argentinos Mariano y Hugo Jinkis, y Traffic Sports del estadounidense Aaron Davidson.

El dinero con el que Datisa se habría asegurado el contrato de la Copa América se habría repartido así: $ 20 millones por la firma del contrato (en 2013); $ 20 millones por los torneos de 2015, 2019 y 2023, y $ 30 millones por la Copa América Centenario.  

La acusación no habla de fondos entregados ni a la Conmebol ni a las federaciones, sino a sus directivos; $ 3 millones para 3 altos funcionarios de la Conmebol (su presidente y los presidentes de las asociaciones de fútbol de Argentina  y Brasil) y $1,5 millones para los presidentes de las restantes 7 federaciones. Así como $ 700.000 para un funcionario adicional. A eso hay que añadir que la Copa América de 2023 está adjudicada a Ecuador.

En torno al pedido del asambleísta Ramiro Aguilar al procurador general del Estado, Diego García, de que en su calidad de presidente del Consejo de Lavado de Activos del Ecuador impulse la investigación a todas las operaciones y transferencias monetarias realizadas desde las cuentas de la FEF, las de su presidente (Luis Chiriboga Acosta) y las de sus dirigentes, la Procuraduría se pronunciará en las próximas horas.

Un “terremoto” con “réplicas”

Como si se tratase de un terremoto, la actuación de la justicia norteamericana provocó que las autoridades judiciales de otros países inicien averiguaciones a sus federaciones nacionales de balompié.

En Paraguay, sede de la Conmebol,  la Cámara de Diputados aprobó un proyecto de ley con el que se derogará la polémica ley 1070 -vigente desde 1997- que le concede inmunidad total al predio del organismo, sus bienes y documentos, por lo que estos no podían ser objeto de allanamiento, requisición, confiscación, expropiación y cualquier otra forma de interferencia.

En Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Uruguay y Venezuela se abrieron investigaciones y se colabora con los procedimientos de la justicia norteamericana.

Mientras en Europa nuevos datos salen a la luz. John Delaney, presidente de la Federación Irlandesa de Fútbol, reveló que la FIFA le pagó a Irlanda para que no denuncie a los tribunales por el gol con el que  Francia la dejó al margen del Mundial ‘Sudáfrica 2010’ en la repesca. En la jugada de aquel tanto existió una clara mano de Thierry Henry.  Aunque Delaney no lo ratificó, la prensa irlandesa habla de que el desembolso habría sido de 5 millones de euros ($ 5,63 millones). (I)

Datos

Luis Chiriboga dijo ayer que la Fiscalía está haciendo lo correcto. Además, por su propia cuenta, rindió una declaración voluntaria ante una fiscal en Guayaquil.

La Fiscalía de Nueva York tiene en la mira casas y departamentos que serían confiscados si se comprueba que se obtuvieron con dinero de sobornos o que se usaron para cometer delitos.

Ante la sospecha de que Nike sería la multinacional de ropa deportiva que habría obtenido licencia para dotar de uniformes a la selección brasileña a través de sobornos, las acciones de la firma cayeron en 1,5%.

La bancada del Partido Revolucionario del Senado de México pidió ayer al Sistema de Administración Tributaria un informe sobre  las auditorías a federaciones, deportistas, comentaristas  y presidentes de los equipos de fútbol que juegan el torneo de ese país.