Sabine Kehm, representante de Michael Schumacher confirmó que el expiloto alemán salió del coma inducido y que abandonó el hospital de Grenoble (Ginebra) en el que llevaba ingresado desde hace casi 6 meses por un accidente en esquí.

Kehm agradeció en un comunicado el tratamiento recibido por parte de los doctores, enfermeras y terapeutas de ese centro hospitalario, de los que destacó que han hecho “un excelente trabajo en estos primeros meses... Michael dejó el hospital de Grenoble para continuar con su larga fase de rehabilitación. Ya no está en coma”.

El portavoz no ofreció nuevos detalles sobre el estado del séptuple campeón de Fórmula 1, que sufrió un accidente de esquí en la estación de Méribel, los Alpes franceses, donde posee una residencia de lujo y donde practicaba este deporte junto a su hijo Mick.

“La familia también desea dar las gracias a toda la gente que le ha enviado sus buenos deseos a Michael. Estamos seguros de que le ayudaron”, concluye el comunicado.

El deportista, que fue trasladado este lunes al Hospital Universitario de Lausana, fue sometido a varias operaciones cerebrales desde su accidente y en ocasiones la prensa llegó a especular con su muerte. Por eso es que la familia ha destacado que el restablecimiento del expiloto será largo y difícil, y ha pedido a los medios de comunicación que dejen trabajar con mayor calma a los médicos que le tratan.

En enero un reportero disfrazado de sacerdote intentó ingresar en la habitación del alemán. En abril, los médicos reportaron que ‘Schumi’ mostraba signos de estar despertando del coma al que fue inducido artificialmente para limitar algún daño a su cerebro. Sin embargo, las versiones no fueron confirmadas.

Larga recuperación

Aunque Kehm no detalló cuál era el próximo destino de Schumacher, poco después una portavoz del Hospital Universitario de Lausana, ubicado en el oeste de Suiza, aseguró que el expiloto de F1, Schumacher, había ingresado a ese centro.

“Está aquí, llegó esta mañana (lunes)”, dijo Darcy Christen a una agencia internacional de noticias.

Christen declinó indicar en qué unidad se iba a tratar específicamente a Michael, cuya residencia está en una ciudad entre Lausana y Ginebra, aduciendo el secreto médico y la privacidad de la familia.

Simone Di Giovanni, profesor experto en neurociencia de Imperial College London, aseguró que era muy difícil pronosticar una recuperación en pacientes que estuvieran saliendo de un coma.

“(Las reacciones) pueden estar en el rango de alguien que simplemente abra los ojos y responda a estímulos verbales (...) a alguien que interactúe con su ambiente y use el lenguaje y quizás pueda tener una conversación sencilla”, dijo.

“En este caso, nadie -a excepción de los médicos que están tratando a Michael Schumacher - sabe exactamente cuál es la condición del paciente en este momento”.

Di Giovanni agregó, no obstante, que la rehabilitación mejoraría la condición clínica de Schumacher en las próximas semanas y meses.