Hace menos de un año el escenario habitual de Jonathan Suárez eran las canchas de básquet como pívot, por su estatura de 1,85 metros, que le permite bloquear los remates de los adversarios.

A sus 18 años no estaba en sus planes convertirse en un cantante de lo que muchos conocen como música urbana, por su origen callejero. Incluso su personalidad un poco introvertida también se lo impedía.

Como siempre le gustó la música, en especial el reggaetón de intérpretes como Daddy Yankee, solía improvisar rimas en casa. Una de ellas la hizo con su hermano de 17 años. Descargaron una pista, a través de YouTube. Luego grabaron y empezaron a difundir por mensajes de WhatsApp a sus amigos en su natal Quevedo, entre ellos David Arévalo, el que más insistió. A ellos les gustó tanto que le sugirieron hacerlo profesionalmente, pero Jonathan no tenía idea de cómo hacerlo y mucho menos contactos. Aquel experimento ocurrió justo cuando Jonathan venía de vivir 7 meses en Quito donde jugaba para el equipo de la UTE.

Ronny Núñez, uno de sus excompañeros de básquet, le recomendó al DJ Andriu (Andrés Romero), con quien grabó ‘Hey morena’, su primera canción, que es reggaetón.
Para entonces, Jonathan adoptó el nombre artístico de Lion K. Como el básquet es su otra pasión, escogió un pseudónimo que le recuerde su origen canastero. Lo de ‘Lion’ es por ‘león’ en inglés, pues se autodescribe como una fiera en la cancha y ahora en el escenario.

El complemento ‘K’ es la abreviación del vocablo anglosajón ‘king’. Explica que más allá de asociar ‘rey león’, el trasfondo de su nombre artístico tiene que ver con LeBron James, el jugador de la NBA, quien es conocido como ‘The King’ y juega en los Cleveland Cavaliers.

Lion K aprovechó las redes sociales para difundir ‘Hey morena’, cuyo contenido es obvio, el describir al tipo de mujer que le gusta y que, según él, la puede encontrar en cualquier lado. “Es una canción con la que muchos se pueden identificar”. Sin embargo, la primera grabación no le gustó porque era demasiado casera. Por eso recurrió a DJ Andriu para que le ayudara a producirla profesionalmente.

El video lo grabó en la productora MC Films con el cineasta Andrés Mercado, y ha conseguido más de 22 mil reproducciones en cuestión de seis meses. Ese vínculo con Mercado, quien también es cantante, le permitió a Lion K conocer a Francisco Rodríguez (Franky Records), con quien trabajó en ‘Ausencia y olvido’, la canción que actualmente promociona el quevedeño.

Se trata de un ‘romantic-flow’ que está fusionado con pop latino y algo de mambo, según explica su intérprete. La historia que relata en esa canción tiene que ver con una relación fallida (recurso habitual de los cantantes contemporáneos para escribir sus canciones).

Cuenta que conoció a la chica (a quien se refiere en ‘Ausencia y olvido’) mientras jugaba básquet. Ella, de quien Lion K prefiere reservar su identidad, también era jugadora de básquet. Luego ambos compitieron en un torneo que se realizó en la provincia de Santa Elena. Allí fue donde empezaron a conocerse. Empezaron su romance que duró dos años.

“Reconozco que fue un amor juvenil, adolescente. Eso pesa mucho. Quizás no estábamos preparados y eso fue desgastando la relación. Pero al final fue una bonita experiencia que quiero recordar, a través de esta canción”, dice el cantautor riosense, quien además de Daddy Yankee tiene como referentes a Farruko y el colombiano Maluma, quien recientemente ofreció conciertos en Ecuador.

Afirma que con Franky Records existe mucha química. “De él se puede aprender mucho. Tiene tanto talento que de inmediato te orienta en lo que puede ser un éxito radial”, dice Lion K.

El cantante fluminense tiene otra canción. En esa hace dúo con su hermana Iris, de 14 años. “Es un pop latino que se llama ‘Mi delito es amarte’. La canción tiene su video que se grabó en El Cajas, en la provincia de Azuay. Por el momento solamente quiero difundir ‘Ausencia y olvido’. Con las otras canciones grabaré una nueva versión, una que sea más profesional”, explica Jonathan Suárez, un exbasquetbolista que ahora prefiere que lo conozcan como Lion K. (I)