Miembros de grupos especiales de la Policía Nacional rescataron con vida a una persona de 80 años de edad, que había sido reportada como desaparecida tras el desbordamiento del río Damas en la parroquia Alluriquín, en Santo Domingo de los Tsáchilas. 

Elementos del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) y del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) recorrían el lugar. 

El presidente de la República, Rafael Correa, visitó este martes la zona afectada. La Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos registraba 4 fallecidos, 300 afectados y 65 viviendas afectadas por esta tragedia. Hasta las 13:00 se había reportado 4 desaparecidos. 

El Primer Mandatario previamente realizaba una visita al albergue que se instaló en el recinto ferial de Santo Domingo para los damnificados del terremoto, pero la emergencia en Alluriquín lo obligó a trasladarse a esa parroquia.

El desborde del río trajo consigo palos, piedras y el lodo llegó a varias cuadras. La gobernadora de Santo Domingo de los Tsáchilas, Doris Merino, señaló que el 40% de la zona sufrió cierto grado de afectación y más de 200 personas fueron evacuadas hacia Santo Domingo, donde se instalaron albergues para los damnificados que llegaban de Manabí, pero ahora también son ocupados por los locales. Existen 6 albergues monitoreados por el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES).

Durante su recorrido, alrededor del mediodía, el Jefe de Estado se solidarizó con las familias de las víctimas y manifestó la urgencia de la reubicación de gran parte de la población de Alluriquín, debido a que la misma se encuentra en zona de riesgo.

"Debemos ser coherentes y no podemos vivir en zona de riesgo, no podemos hacer milagros, si estamos en zona de riesgo, tarde o temprano va a ocurrir una desgracia", dijo el Mandatario en declaraciones recogidas por el portal oficial El Ciudadano. 

Una vez que el cauce del río volvió a la normalidad, maquinaria del Gobierno Autónomo Descentralizado de Santo Domingo se dispuso a limpiar la zona. Drones sobrevolaron la zona superior del río para verificar que no existan un represamiento y que pueda complicar la situación.

Los habitantes lucían intranquilos y trataban de limpiar el lodo que ingresó a sus hogares o negocios. Félix Cedeño tenía un karaoke sobre la calle Eugenio Espejo, la más afectada y por donde entró el agua del río. "Lo perdí todo. Estaba cerrado por el estado de excepción, pero la fuerza del caudal hizo que se rompa la puerta e ingrese todo", contó.

Hasta las 13:00, la vía Aloag – Santo Domingo permanecía cerrada por un deslave en la zona y la situación en Alluriquín. Las autoridades evaluarán la situación para decidir la habilitación de la carretera. (I)

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— Riesgos Ecuador (@Riesgos_Ec) April 26, 2016