El Real Madrid cumplió con el trámite y repite presencia en semifinales de Liga de Campeones, tras rematar la eliminatoria ante el Apoel chipriota (5-2), en una noche de rotaciones blancas en la que Kaká guió el camino, cerrando un papel decisivo en cuartos de final, y Cristiano Ronaldo ejecutó.

Dejó José Mourinho otra de sus medias verdades. "Haré poquísimos cambios" aseguró en la previa. Varane, Sahin, Granero, Altintop y Kaká entraban en un once que cambiaba su cara. La eliminatoria ante el Apoel ha sido importante para mantener la ventaja en Liga. Apenas ha tenido desgaste con un triunfo a ritmo bajo en Nicosia y con las rotaciones funcionando en el Bernabéu.

Arbeloa, Xabi Alonso, Özil y Benzema tuvieron un descanso que les vendrá bien. Con la cantera viendo las puertas cerradas del primer equipo, jugadores como Sahin y Granero ganan confianza en estas citas.

El Apoel se plantaba en el Bernabéu para disfrutar del final de un sueño. Ni con todo perdido fue valiente. Encerrado en su terreno, como hizo en su propio estadio, entregó el balón al Real Madrid. Los goles eran cuestión de minutos.

Los goles españoles los convirtieron: Cristiano Ronaldo (m26 y m76); Kaká (m37); Callejón (m80); Di María (m84). Mientras por los visitantes anotaron Manduca(m66) y Solari de penal (m82). Con este resultado los madridistas esperan su siguiente rival que será el equipo alemán Bayern Munich.