El fútbol para él es un tema inagotable. Desde muy joven se encuentra vinculado a este deporte y son tantas las vivencias que lo mantienen atado a las canchas.

Juan Carlos Paredes, quiteño de 43 años, técnico de las selecciones de fútbol del Colegio Nacional Mejía, es uno de los personajes conocidos por la afición y en especial de los asiduos asistentes al estadio Atahualpa, porque su responsabilidad ha sido el mantenimiento del engramado de la cancha.
Como técnico de fútbol ha realizado una serie de cursos organizados por la FEF, AFNA y otras instituciones; recuerda con afecto al yugoslavo Dussan Dráskovic.

La final ante el colegio Montúfar la vivió intensamente; como conocedor a fondo de la cancha del Olímpico Atahualpa, realizó las últimas prácticas en el estadio de San Carlos, que tiene una cubierta de césped un tanto similar y “les preparé a los muchachos, porque la del Atahualpa sí desgasta”.

Richard (Estrella) es un jugador con mucho futuro, como todos mis jugadores; es disciplinado, buen alumno y tiene su temperamento, que es muy necesario especialmente para los delanteros, estoy seguro de que va a dar mucho más en un equipo que valore sus condiciones; desde que llegó al colegio demostró ser un delantero que no perdona”, dijo Paredes.