Una final siempre será motivo de gran expectativa, más aún si se trata de un “clásico”. Desde las 11:00 de hoy, en el estadio Atahualpa, las selecciones del “Patrón” Mejía y el “Señor” Montúfar definirán el título del Campeonato Intercolegial de Fútbol Sub-18 de Quito.

Como cualquier otro “derbi”, el de los estudiantes capitalinos ha concitado la atención de la ciudadanía, al punto que ex alumnos de ambos establecimientos y público en general pidieron entradas para asistir al cotejo.

Solo entre estudiantes de los planteles del Juan Pío Montúfar y del José Mejía Lequerica, padres de familia y profesores, sumados a  los chicos de las instituciones invitadas: Simón Bolívar, 24 de Mayo y Fernández Madrid, sumarían 20.000 concurrentes.

Eso sí, de acuerdo a las exigencias de seguridad de espectáculos públicos, la Policía Nacional, la Cruz Roja, la Federación Deportiva Provincial Estudiantil de Pichincha, el Ministerio del Deporte y el Ministerio de Educación organizaron un operativo de control.

Las medidas pretenden evitar confrontaciones entre los estudiantes, pues en años anteriores se lamentaron acontecimientos de esta índole. Un antecedente es la suspensión de la final del intercolegial de fútbol Sub-16 masculino entre ambos colegios, en abril de 2012; el duelo no se efectuó debido a la falta de garantías.

No obstante, los rectores del Montúfar y del Mejía, que  trabajaron conjuntamente con los alumnos para evitar desmanes, solicitaron a la Policía Nacional y al Ministerio de Educación talleres de concienciación y responsabilidad ciudadana. Incluso el ministro del Deporte, José Francisco Cevallos, visitó a los adolescentes en sus colegios y los exhortó a vivir la final como una fiesta para disfrutarla sanamente.
Antecedentes

En opinión de Fernando Morales, presidente de la Federación Deportiva  Provincial Estudiantil de Pichincha, jugadores o entrenadores de gran suceso en el balompié profesional se forjaron en los torneos intercolegiales, a los que considera un “semillero”.

En el caso del colegio Montúfar, uno de los últimos elementos surgidos desde sus aulas es el ex defensa Johnny el  “Chalmeta” Pérez, directivo en la actualidad del club de segunda categoría Los Loros. En el caso del colegio Mejía, está el volante Christian el “Diablito” Lara, quien actualmente  milita en el Manta Fútbol Club.

Incluso los directores técnicos de ambas instituciones tienen vínculos con el fútbol profesional. Juan Carlos Paredes, de 43 años, estratega del Mejía, dirigió a la Sub-12 y Sub-16 de Universidad Católica y enseñó en la escuela de la Asociación de Fútbol No Amateur de Pichincha (AFNA).

Su hijo y asistente técnico en la banca del  “Patrón”, Diego Xavier Paredes, fue el tercer arquero de la nómina de Deportivo Quito que en 2008 alcanzó el Campeonato Nacional bajo el mando del timonel Carlos Sevilla. Pablo Paredes, entrenador del Montúfar, quien tiene 64 años, fue futbolista profesional por más de una década, se desempeñó como delantero en América y Deportivo Quito, se retiró de la actividad en 1979.

Como técnico dirigió a Universidad Católica cuando estuvo en la segunda categoría y aportó sus conocimientos en las divisiones menores de Deportivo Quito y El Nacional. Entre los elementos que entrenó están Fabián Cubero, Johnny Baldeón, Édison Méndez y Cléver Chalá.

Para la final intercolegial Sub-18, Juan Carlos y Pablo Paredes se comprometen a brindar espectáculo a través de sus “pupilos”. Coinciden en señalar como apasionante este “clásico”, pero que solo es un encuentro de fútbol, no hay por qué exacerbar los ánimos de los chicos.

Por lo pronto, de lo que recuerda el profesor Juan Carlos Paredes, en los últimos años la balanza favorece al Mejía. En 2007, en los cuartos de final de la Sub-18, el “Patrón” se impuso 3-1; en 2008, en las semifinales del  certamen Sub-13, el Montúfar cayó 2-1.

El cotejo acapara, además, la atención de ex alumnos de ambos colegios con participación en la vida política nacional. En el Montúfar estuvieron, entre algunos, Blasco Peñaherrera, ex vicepresidente de la República, y José Gallardo, ex ministro de Defensa. Del Mejía fueron alumnos el actual vicepresidente Lenín Moreno y el ministro de Finanzas, Patricio Rivera.

ERNESTO GUERRA FORMÓ SU CARRERA EN LOS INTERCOLEGIALES

Condecorado el pasado diciembre por la Confederación Sudamericana de Fútbol (CSF) por anotar el primer gol del campeonato ecuatoriano el 10 de noviembre de 1957, Ernesto Guerra (79 años) recuerda como “honroso” su paso por las selecciones Sub-15 y Sub-18 del colegio Mejía, en el que estudió desde 1948 a 1954.

Ahí, cuando niño, en la Plaza del Teatro, con los colores del Real Manabí, aprendió a defender con orgullo toda camiseta que cubriera su piel. “El fútbol intercolegial siempre fue una fiebre, los colores del Mejía se los defendía con pasión. Las cosas han cambiado un poco; en mi época, el clásico estudiantil de Quito era con el Colegio  Militar. También había bastante rivalidad con el Central Técnico y el  Montalvo”.

El “Trompudo”, como también se lo conoce, considera que los torneos intercolegiales siempre fueron vitrina de grandes jugadores, incluso existía una suerte de “hermandad” entre algunos colegios y clubes de Pichincha.

Los estudiantes del Mejía alimentaban de futbolistas a Deportivo Quito, los del colegio Benalcázar a Liga de Quito, los del Juan Montalvo al Aucas y los de la Academia Ecuador al España. “Esto no solo sucedía en Quito; en Guayaquil, jugadores del Vicente Rocafuerte también salieron al fútbol profesional”, afirmó el ex jugador.

Algunas anécdotas de su trayectoria deportiva estudiantil las recoge en su libro autobiográfico, que espera terminar dentro de dos meses.

Guerra, volante 10 en su etapa de jugador en las décadas del 50 y 60, y director técnico de Deportivo Quito, Aucas, El Nacional, Valdez y Filanbanco, cree que el deporte estudiantil debe tener todo el apoyo de las autoridades deportivas y nunca desviarse de su misión: aportar a la formación integral y salud de niños y adolescentes.