La frustración de Wayne Odesnik era evidente. El estadounidense acababa de perder el penúltimo punto del partido y de golpear su raqueta contra la arcilla. Del otro lado de la cancha estaba el colombiano Juan Sebastián Cabal, quien se encontraba a un saque de llevarse el encuentro válido por la segunda ronda del Challenger de Guayaquil.  

El caleño sacó fuerte y su rival se quedó en la red. Solo un punto jugó Odesnik con su nueva raqueta, ya que al perder el partido, golpeó ésta también contra la arcilla... dañó dos raquetas en menos de un minuto.

De su parte, Cabal solo atinó a dar un grito y tras esto se dirigió al centro de la cancha, saludó con Odesnik y luego dio un apretón de manos al juez de silla, el ecuatoriano Jimmy Pinoargote.

A final, el tenista “cafetero” se impuso al norteamericano por 6-4 y 6-3, en 1 hora y 41 minutos de juego, en la cancha número 2 del Guayaquil Tenis Club Anexo Samborondón. “Fue un partido muy complico, en especial porque es un jugador zurdo y él buscaba abrir mucho la cancha a su lado”, lanzó Cabal.

El rival del colombiano en cuartos de final, hoy, es el español Rubén Ramírez-Hidalgo, quien se impuso al ruso Alexander Lobkov, por parciales de 6-3, 6-4.

Sí, hoy Cabal y Ramírez-Hidalgo son rivales, pero ayer compartieron cancha, ya que son pareja en el cuadro de dobles del torneo.

Luego de haber ganado sus respectivos singles, ambos se enfrentaron a la dupla conformada por los argentinos Maximiliano Estévez y Mateo Martínez. En los dobles, el colombiano y el español se impusieron por 6-1, 6-3.

Otros de los vencedores ayer fueron los argentinos Martín Alund y Guido Pella. Ambos se enfrentan hoy en los cuartos. El primero se impuso en segunda ronda al peruano Duilio Beretta por 6-0, 6-3, mientras que Pella venció al colombiano Nicolás Barrientos por 6-3, 6-7, 6-3.