Superar y aceptar mentalmente la partida del delantero Christian Benítez en la selección, es la esencia del trabajo sicológico que realizará desde hoy el motivador Orlando Caicedo con los 22 convocados para el duelo ante España, en el Monumental de Guayaquil, este miércoles.
La tarea será distinta a la habitual que hizo, hasta la decimocuarta fecha por Eliminatorias a Brasil 2014. “A todos nos ha golpeado, pero hay que superarlo y hacerlo progresivamente; a fin de que el partido con Colombia tengamos otra mentalidad y estado anímico”, dijo Caicedo.
El profesional colombiano tendrá 5 días para acentuar en los jugadores la realidad sin la presencia del atacante de 27 años. “Hacer conciencia del duelo y aceptar esa ausencia, es parte fundamental para seguir con el momento actual”, añadió.
Por ello habrá una tarea grupal y personal con cada uno de los jugadores para mantener la comunión de ideas y la fortaleza familiar demostrada a lo largo del proceso eliminatorio. “Ahora hay un compromiso adicional, no solo de la selección sino de toda la nación, que es volcarse a lograr ese objetivo que el propio Benítez lo mentalizó”.
Caicedo recalcó que la partida de una persona deja dolor, pero hay que sobreponerse. “Cuando alguien fallece, hay que rescatar todo lo positivo. ‘Chucho’ nos dejó enseñanzas y debemos aplicarlas. Todo el país debe ayudarnos a salir adelante”.
El psicólogo de la “Tri” aseguró que las tareas serán individualizadas porque cada uno tiene un diferente canal de percepción. “Los seres humanos por esencia somos diferentes, hay unos más emocionales, más intelectuales y emotivos”.
El primer contacto del motivador con los seleccionados será para recordar las virtudes de Benítez. “Una de las partes importantes es hacer conciencia de la ausencia y fortalecerse de ese mismo dolor”.
Lo ideal es darle la importancia que el suceso merece, sin que afecte la sínquisis de los futbolistas y menos aún el rendimiento en el terreno de juego. “Este factor puede generar ansiedad en algunos, porque no todos pensamos igual y hay que darle la importancia que el hecho amerita. Fue un golpe fuerte y así debemos trabajarlo, pero sin descuidar lo que ya se hizo antes, porque eso necesita de una continuidad”.
El sicólogo adelantó que todo esto será un proceso que requerirá de un tiempo prudente, pese a los pocos minutos que tiene para conversar en la concentración. Caicedo considera que el cambio del sitio para reunirlos (Guayaquil), en esta oportunidad, servirá para una mejor tarea sicológica.
“Hay que sacar provecho a los ambientes, no quedarnos en lo que fue en el pasado sino lo que tenemos en el presente y lo que habrá en el futuro. Además cuando vamos a la habitación de la persona fallecida no es para lamentarnos y sentirnos mal; al contrario debemos ayudarnos a recordar los momentos alegres”.
Los sicólogos ecuatorianos Bruno Stornaiolo y Patricio Cevallos, quienes tienen vinculación con clubes deportivos, también creen que la partida del futbolista, si bien golpeó emocionalmente el ánimo del equipo, servirá para fortalecer el grupo.
“Siempre la muerte lleva a unirnos como familia”, dijo Stornaiolo. Mientras que Cevallos considera que la trayectoria de Benítez como jugador, esposo y padre, debe servir para recapacitar sobre la labor de un futbolista. “Yo creo que es una de las profesiones más sacrificadas y menos entendidas. Se les exige mucho sin darnos cuenta, que al igual que todos, son seres humanos”.