Los ‘Cuatro Mosqueteros” de la natación quiteña: Enrique Ledesma, Diego Quiroga, José Luis Yépez e Ignacio Merino, medallistas de oro en los Juegos Bolivarianos de 1977 y en los Juegos Cruz del Sur de 1978, terminaron su carrera sin la satisfacción de bracear en una piscina olímpica. Sus entrenamientos siempre los realizaron en una pileta no reglamentaria de 25 metros.

En el sector de Miraflores, en donde desde hace 27 años funcionaba una piscina semiolímpica de 25 metros, que con el correr del tiempo, desde su inauguración hasta cuando se decidió cerrarla, sufrió un visible deterioro, hoy se levanta una piscina olímpica (50 metros) que servirá como un ‘laboratorio’ para que los ‘delfines’ pichinchanos puedan desarrollar su nivel competitivo.

La historia de este moderno escenario se remonta a la década de los 70, cuando se creó la Unidad Ejecutiva Pichincha 77, liderada por el entonces presidente de la Concentración Deportiva (CDP) Patricio Romero Barberis (+), encargada de la infraestructura de la institución. La construcción de piscinas semiolímpicas (25 metros) en distintos sectores de la ciudad, la pista atlética y el velódromo fueron, entre otras, las obras planificadas por la Unidad Ejecutiva.

La idea de construir una piscina de 50 metros fue coyuntural con los éxitos logrados por los deportistas antes mencionados; la fosa para saltos fue la primera en tomar forma con una estructura de hormigón que se levantó en terrenos de La Vicentina; junto a ella y hacia el costado sur se emprendió la construcción de la piscina de 50 metros con el mismo material.

Lamentablemente la falta de recursos económicos tuvo directa incidencia en la paralización de la obra y adicionalmente los cambios de gobierno, de ministros del ramo y de los organismos estatales del deporte bloquearon la continuidad de este proyecto.

Así pasaron los años y aquella ilusión de la piscina olímpica para Pichincha se trastocó en forma paulatina hasta desechar la idea de concluir el proyecto en La Vicentina, pese a las buenas intenciones de los directivos de turno.

Se intentó la construcción en el sector de La Carolina e inclusive en el 2004 se colocó la primera piedra de un complejo náutico, pero posteriores dificultades en cuanto a los propietarios de los terrenos, frustraron la iniciativa.

“El tema de la piscina olímpica siempre ha sido una de las preocupaciones de quienes hemos estado al frente de la institución y quizás la suerte me ha correspondido a mí para llevar adelante esta obra que puede ser la que nos faltaba para una mejor preparación de nuestros nadadores", señaló Aníbal Fuentes, presidente de CDP.

A partir del 17 de enero del 2011, fecha de adjudicación de la obra, comenzó la readecuación de la piscina, duplicando su largo, a cargo del ingeniero constructor Jaime Pérez Clavijo.

El costo de la obra bordea los 650 mil dólares, dinero que no estuvo en el presupuesto de la matriz provincial del deporte y el financiamiento se logró gracias al apoyo de entidades como el Gobierno de Pichincha, Municipio de Quito y fondos propios de la institución, en primera instancia y posteriormente del Ministerio del Deporte.

Sesión solemne y premiación
Con motivo de la celebración de los 90 años de vida institucional de la CDP, esta noche tendrá lugar la sesión solemne de aniversario en la cual se procederá a la premiación de los mejores deportistas de la provincia en el año 2013.

Angela Tenorio, subcampeona mundial juvenil de atletismo en la prueba de los 200 metros lisos, en el certamen de Ucrania en julio pasado, recibirá la distinción como la Mejor Deportista de la provincia.

Con ella, 39 deportistas recibirán sendos reconocimientos como los mejores en un número igual de disciplinas deportivas, luego del análisis realizado por el Departamento Técnico de CDP.

Datos

La Unidad Ejecutiva Pichincha 77 impulsó la construcción de la piscina olímpica General Píntag en terrenos del complejo deportivo de La Vicentina, pero quedó inconclusa por falta de recursos económicos.

Los éxitos alcanzados por los ‘Cuatro Mosqueteros’ de la natación capitalina: Diego Quiroga, José L. Yépez, Enrique Ledesma y José I. Merino motivaron a los dirigentes de ese entonces para construir un nuevo escenario.

En el 2004 se retomó el proyecto de la piscina olímpica, en La Carolina.