Guatemala, donde casi la mitad de sus 14,3 millones de habitantes son indígenas, es el país con mayor población descendiente maya, seguido por México. En Honduras, Belice y El Salvador existen grupos de esa cultura.
Según el último censo de 2002, en Guatemala la población indígena constituye el 42% de los habitantes, aunque ellos afirman superar el 60%.
La mayor parte de descendientes mayas se concentran en el altiplano en el oeste del país y se dividen en 22 comunidades lingüísticas.
En México, cifras del Instituto Nacional Indigenista indican que en ese país viven 1,4 millones de mayas en cinco estados sureños: Yucatán, Chiapas, Quintana Roo, Campeche y parte de Tabasco.
En Honduras, el 90% de la población (8,4 millones de habitantes) es mestiza y el resto son 7 grupos étnicos: maya-chortis (únicos descendientes de los mayas), lencas, tawahkas, tolupanes o pech, misquitos y garífunas.