La conclusión de Gustavo Quinteros sobre el debut de Ecuador ante Brasil se resume en tres palabras: pudo ser mejor. Para el estratega, el resultado no es despreciable, la puesta en escena del planteamiento original fue intermitente e imprecisa; y el ‘ojo biónico’ del juez de línea comprometió la posibilidad más clara de obtener el triunfo.

Una vez establecidas las responsabilidades en su equipo y el arbitraje, el seleccionador reconoció el accionar de un oponente, del cual destaca que se mantuvo como una amenaza latente y absorbió el caudal de producción ofensiva de la ‘Tri’. “Por momentos salió el partido que queríamos, por momentos no. El rival nos hizo retroceder las líneas”, aseveró en rueda de prensa.

Los números sustentan la lectura del DT. Sin duda el control fue de Brasil y su posesión se mantuvo en un 65% (ver infografía). Los dirigidos por Dunga hallaron espacios en 7 ocasiones para ingresar al área y disparar (solo 3 con dirección al arco), y si bien no se pude considerar como asedio, es claro que por tramos del partido la ‘Tri’ no pudo asentar su zona de presión por delante de la línea central como indica la doctrina de Quinteros.

Aún siendo el claro dominador, la escuadra ‘verdeamarella’ no consiguió instalarse en el área ecuatoriana, algo que se debió a la delimitación de la zona de influencia del rival que marcó Ecuador. Las claves fueron: la prestancia de Arturo Mina y Gabriel Achilier en la zaga, el control y distribución de Christian Noboa y Carlos Gruezo en la media, el doblaje de funciones de Antonio Valencia y Jefferson Montero para cubrir las flaquezas de los laterales; y la presión de Miler Bolaños y Énner Valencia en la salida de los defensas contrarios. Esteban Dreer en el arco no solo salvó tres tiros de gol, sino que además dio fondo a su equipo durante el repliegue.

Tanto el mapa de calor -que establece las zonas de circulación y presión- como el registro de los sectores donde la ‘Tri’ perpetró las faltas, demuestran que el último tercio del campo ecuatoriano no acumuló mayor número de incidencias ofensivas por parte del rival. Otro aspecto por resaltar es la capacidad de recuperación por la banda derecha (16/24 recuperaciones) en la cual los pentacampeones acentuaron su trabajo de la mano de Philippe Coutinho, ante la merma física que sufrió William al final del primer tiempo por los constantes choques con Gruezo y Walter Ayoví.

El punto bajo fue la finalización de los contragolpes y Quinteros apuntó falencias en el último pase y el uno contra uno. Bajo este contexto solo se ejecutaron 3 tiros al arco en el partido, uno de los cuales acabó en un gol legítimo que fue anulado por el línea Carlos Astroza. Quien más la pasó mal en estas funciones fue Énner, quien se vio absorbido por la marca implacable de Casemiro y Elías, ambos con la consigna de mermarlo a partir de las faltas sistemáticas.

El seleccionador explicó sus variantes (Fidel Martínez, Fernando Gaibor y Jaime Ayoví) cerca del cierre del partido, dejando claro que no buscó sellar el empate como primera opción. “Fidel tiene velocidad para tomarse la banda, Walter necesitaba una ayuda porque había entrado Lucas Moura y Montero había hecho mucho desgaste... a Miler lo iba a sacar antes, porque tuvo problemas con un par de jugadores. Énner me pidió el cambio por calambre”, indicó.

“El árbitro asistente es nuestro”

La prensa brasileña fustigó ayer la actuación de la selección de Dunga ante Ecuador y admitió que el empate cero a cero fue producto de un error de arbitraje que perjudicó a los ecuatorianos. “Una manito del auxiliar chileno Carlos Astroza evitó la derrota de la selección”, dice el diario Folha de Sao Paulo, el más vendido del país, con el siguiente título: “Brasil cuenta con el error del árbitro y empata ante Ecuador en la Copa América”.

O Globo, por su parte, destaca: “El guardameta Alisson tuvo suerte que el juez de línea vio que el balón salió del campo, algo que no ocurrió”. La cadena Globoesporte apuntó que el equipo de Dunga mejoró en la posesión del balón y en la creación, pero no tuvo contundencia al atacar. El comentarista Juca Kfouri, uno de los más respetados del país, escribió en su blog del portal de noticias UOL: “El árbitro asistente es nuestro”. Al analizar el desarrollo del juego resaltó que a Ecuador “le robaron la victoria”. (I)