Siempre me han interesado los después. Pasa algo, sucede algo; suceda lo que suceda siempre hay un " ¿qué viene después?" Son preguntas existenciales pero interesantes para ver dónde van las cosas, el rumbo qué los sucesos toman. En el caso del horrendo crimen contra la Sra. María Bernal va a resultar cierto que la víctima es el pobre policía Cáceres víctima de una mujer obsesiva, celosa, que lo torturaba con sus escenas tóxicas y que además ha tenido asistencia psiquiatra: una ficha la Sra. Bernal, al parecer. Y resulta entonces que él hizo lo que hizo porque estaba dominado y había perdido la cordura por tanto cosa loca que María le hacía y lo torturaba.
Ah! Claro y la mamá, Doña Elizabet Otavalo ha Sido una mala madre, que no se llevaba bien con su hija, que ha resultado ser correista y ya mismo hasta candidata a la alcaldía de Carapungo por el correismo.
Los después son interesantes. Porque ante tales circunstancias nadie aclara nada. ¿Cómo llegó el cadáver de la Sra. Bernal hasta el sitio donde fue encontrado? Acaso se convirtió en un cadáver volador? Parece que Cáceres solito la mató, cargó su cadáver hasta el cerro ese, hizo el hueco, luego la policía encontró el cuerpo en descomposición y ahora la madre de la fallecida está haciendo proselitismo a favor de la prefecta Pavón.
Estamos acostumbrandonos que nos pasé todo y nos siga pasando todo.
Todo está siendo manipulado para que los culpables sigan en sus funciones de poder y el muerto al hoyo y su muerte una estadística más. Hoy es el peor tiempo de nuestras vidas.
Cuidado los trolles nos pueden hacer creer que la Sra. Bernal se ahorcó...
Encuentren a Cáceres: el policía que escapó de la policía, que asesinó a su mujer en la escuela de policías y que ahora lo busca la policía.
