Acusado, condenado y preso en un proceso sin pruebas, víctima de la más monstruosa trampa jurídica de la historia brasileña, Lula ha elegido a Fernando Haddad como su candidato. Queda todavía un recurso en el Supremo Tribunal Federal, pero la Justicia Electoral impuso un plazo para su sustitución para que sea el PT que tomara la decisión de lanzar otro nombre, una vez prohibido Lula de concurrir. El anuncio fue hecho por Lula en mensaje público.
La absurda prohibición sobre Lula se apoya en un proceso sobre el tal departamento, que nunca fue de él, a punto que el juez Sergio Moro dijo que lo condenaba no basado en pruebas – que nos las tenía -, sino sobre la base de convicciones.
Frente a esa circunstancia, Lula y el PT fueron obligados, para no correr el riesgo de ser excluidos de la campana electoral, a escoger el candidato sustituto hasta el día 11 de septiembre. Fernando Haddad fue estudiante de derecho y de economía en la Universidad de Sao Paulo, donde yo mismo fui su profesor en los cursos de posgrado que ha hecho, en filosofía y en ciencia política. Fue el mejor ministro de Educación que Brasil ha tenido, responsable directo de la gran expansión de sistema educacional del país, sea en las escuelas técnicas o en las universidades públicas. Fue posteriormente elegido alcalde de la ciudad de Sao Paulo.
Fue por su trayectoria como su ministro, principalmente, que Lula lo ha escogido como su candidato, teniendo a la también joven parlamentaria del Partido Comunista, Manuela Dávila, como opción para la vicepresidencia.
Haddad había coordinado el programa electoral y, posteriormente, retomó los grandes viajes por Brasil, de forma similar a los que hizo Lula en sus caravanas (de las cuales recién salió el bellísimo libro de fotos de la Caravana al Nordeste, que yo mismo edité). La recepción que ha tenido Haddad por las nueve provincias de esa región fue espectacular y confirma lo que la derecha más temía: la transferencia de la influencia de Lula, que tiene 59% de apoyo en la primera vuelta en la región que siempre ha sido decisiva en las cuatro victorias electorales nacionales del PT.
Haddad superó rápidamente las resistencias dentro del PT y aparece como el mejor representante de Lula. Como coordinador del programa de su gobierno es quien mejor defiende las posiciones del PT respecto a todos los temas del programa. (O)
