Tras la reapertura de la calle Santa Ana, el lunes pasado, por parte del Ministerio de Cultura y la Gobernación de la provincia del Azuay, fue cerrada nuevamente el martes. Según el Municipio es para realizar trabajos de iluminación.

La calle, considerada histórica, puesto que desde la fundación de Cuenca en 1557 ya estuvo dentro del trazado de la ciudad, estaba cerrada y los ciudadanos no podían transitar por este pasadizo.

El lunes anterior, la gobernadora del Azuay, María Augusta Muñoz, indicó que faltan trabajos por culminar, entre ellos, el sistema eléctrico e iluminación y de adecentamiento de fachadas que son de responsabilidad del GAD municipal y de la Arquidiócesis de Cuenca, respectivamente.  

“Hoy tras 50 años de estar cerrada, la calle Santa Ana se abre para todos nosotros… y qué curioso analizar que la vida del Centro Histórico de la ciudad, ya no se oculta más tras unos muros. Al contrario, ahora más que nunca nos motiva a generar un intercambio cultural y de gestión, para que nuestra población, y en especial los jóvenes, sepa lo que guarda esta ruta original de la Cuenca de antaño”, manifestó la gobernadora.

Sin embargo, el pasado martes la calle fue cerrada, según funcionarios de la municipalidad, porque se efectúan trabajos que están contemplados en las obras planificadas para la ciudad.

“A pesar de la entrega parcial de la calle Santa Ana, por parte del Ministerio de Cultura y Patrimonio, la Dirección de Áreas Históricas y Patrimoniales tiene prevista la culminación de la iluminación monumental y ornamental de este espacio patrimonial, en el cual ya estarán listas las instalaciones a finales de este mes”, señaló la Municipalidad mediante un comunicado.

Actualmente los trabajadores realizan el cableado y colocan las acometidas desde la calle Benigno Malo hasta la Padre Aguirre. Están previstos los lugares donde se instalarán las luminarias en el portal, paredes y pisos.

“El retraso en el proyecto se debe al tema de importaciones de los materiales, debido a que las luminarias vienen desde Europa, que serán emplazadas con la finalidad de contribuir a la estética y a la seguridad de esta calle importante de Cuenca”, según el escrito.

En cuanto a la pared de la Catedral nueva, actualmente se encuentra intervenida y se dará un tratamiento antigrafiti para preservar este bien patrimonial.

La Dirección de Áreas Históricas y Patrimoniales actualizó los estudios eléctricos de la calle Santa Ana, con la finalidad de cumplir las condiciones y especificaciones técnicas exigidas por la Empresa Eléctrica Regional Centro-sur, más un proyecto complementario para su iluminación monumental.

Adicionalmente, se realizó el estudio para la limpieza de muros de la fachada lateral de la Catedral de la Inmaculada. “La rehabilitación de esta importante obra fue implementada entre un vínculo interinstitucional del Ministerio de Cultura y Patrimonio con la Alcaldía de Cuenca, a través de la Dirección de Áreas Históricas y Patrimoniales”.

Según el alcalde de Cuenca, Marcelo Cabrera, la municipalidad contribuyó con talento humano en el diseño y la iluminación monumental y del trazado de la calle, además de obras en infraestructura sanitaria, rellenos, desalojos, cajas de revisión para aguas lluvias, drenes, revestimientos de pisos, calas y prospecciones arqueológicas, además de limpieza del muro de ladrillo visto de la Catedral nueva y la limpieza de los zócalos de mármol del muro norte. (I)