El duelo que mantienen el francés Sébastien Ogier (M-Sport/Ford) y el belga Thierry Neuville (Hyundai), por el campeonato mundial, vivirá una nueva entrega entre el jueves y el domingo, en las rutas arenosas y ultrarrápidas del Rally de Polonia.

La temporada está siendo una de las más abiertas de los últimos años y sus dos principales favoritos, Ogier -cuádruple campeón del mundo- y Neuville -segundo en 2016 y 2013-, la afrontan con la misma baza: la regularidad.

La principal cualidad del francés es su constancia, como demuestran los siete 'Top-5' que ha conseguido en otras tantas pruebas en lo que va de campaña. Esta regularidad le ha servido para alcanzar el liderato de la general, donde aventaja en 18 puntos a Neuville, y para recuperarse de un inicio de campeonato complicado.

Pero si el piloto de M-Sport/Ford quiere conservar la cabeza de la clasificación deberá subir al podio en Polonia.

De no hacerlo -como ya le ocurrió en Argentina y en Cerdeña- el de Hyundai podrá sacar ventaja, teniendo en cuenta la puntualidad con la que, él también, sube a la caja: solo en las carreras de Montecarlo y Suecia no terminó entre los tres primeros.

"Tengo grandes recuerdos del rally de Polonia, aquí he ganado dos veces (en 2014 y 2015), pero también tuve aquí, el año pasado, mi peor carrera en lo que a apertura en ruta se refiere", explicó el piloto francés. (D)