Tres presos considerados peligrosos se fugaron el domingo de la cárcel belga de Jamioulx tomando como rehén a una empleada del centro, informan este lunes medios de comunicación del país.

Los tres presos utilizaron a la empleada para que les abriera las puertas y les ayudara a eludir las medidas de seguridad del centro penitenciario.

Los fugados abandonaron la prisión en un automóvil robado en el aparcamiento del centro penitenciario, aunque posteriormente se separaron y continuaron la huida cada uno por su cuenta.

La empleada penitenciaria fue liberada el mismo domingo, cerca de las 20.30 horas (22.30 GMT), en la población francesa de Maubeuge, a escasos kilómetros de la frontera con Bélgica, si bien la policía no dio a conocer más detalles.

En la región han sido desplegadas fuerzas de seguridad federales y locales para perseguir a los fugitivos y las autoridades belgas han emitido una orden internacional de búsqueda y captura.

Uno de los tres prófugos estaba condenado a treinta años por la muerte de un panadero de la misma localidad de Jamioulx, mientras que otro se encontraba en prisión preventiva a la espera de ser juzgado por un delito de asesinato del que está acusado.

Las autoridades dieron a conocer esta tarde la identidad del tercer fugitivo, que cumplía una pena de quince años por doble intento de asesinato.

A raíz de la evasión y para protestar por la inseguridad en la cárcel, los empleados del centro de Jamiolx organizaron hoy una huelga de un día y no acudieron a sus puestos de trabajo.

El Gobierno envió a agentes de policía para que se hagan cargo de la vigilancia de la prisión mientras dure el paro.