En 2009, tras soportar problemas de movilidad, congestionamiento y desorden, ocasionados por miles de comerciantes informales que se tomaron las calles aledañas a los mercados 24 de Mayo y Copacabana, de Otavalo (Imbabura), el Concejo Municipal planteó como proyecto prioritario la construcción de un nuevo mercado.

Luego de múltiples reuniones, el alcalde Mario Conejo y la mayoría de concejales  decidieron que el mejor lugar para la nueva estructura sería en el terreno donde actualmente está ubicado el Estadio Municipal, subutilizado y destruido.

Pero de inmediato los opositores a Conejo rechazaron el proyecto. “Esa no es la solución, sino construir, en el lugar en donde ahora funciona el mercado 24 de Mayo, un centro de comercio moderno de tres o cuatro plantas, de acuerdo con los estudios que se hagan”, expresó en su momento Gustavo Pareja, ex prefecto de Imbabura.

No obstante, Conejo ha defendido su propuesta con el argumento de que una remodelación del mercado 24 de Mayo no es funcional, “porque se mejoraría la apariencia, pero los problemas de tránsito y movilidad en la zona continuarían latentes”. Se planifica que en ese sitio se construya, más bien, una plaza cívica.

Sin embargo, una vez definido el lugar, persistía el problema de la falta de recursos. Mario Conejo indicó que luego de tres años de golpear puertas y solicitar préstamos, el Banco del Estado aprobó un crédito de 9 millones de dólares a nombre del Municipio de Otavalo, entidad que aportaría con un monto similar como contraparte.

Según el Alcalde, a finales de marzo se iniciaría la construcción, una vez que concluya la asignación del contrato por alrededor de 18 millones de dólares. “Así, luego de 18 meses, otavaleños e imbabureños podremos comprar en el mercado más grande y moderno del país”.

El espacio comercial contará con un amplio subsuelo con más de 500 parqueaderos y dos plantas superiores que albergarán a 860 comerciantes, según Ramiro Gómez, presidente de la Comisión Técnica de Construcción del Mercado.