Exeditor de revista reta a Francisco Vivanco a que cierre La Hora
El exjefe de Información de Vanguardia, Jean Cano, retó a Francisco Vivanco a clausurar su otro medio de comunicación, diario La Hora, si en realidad fue la recientemente aprobada Ley de Comunicación el motivo para el cierre del semanario.
En una entrevista con Radio Visión, a la que días atrás también acudió el empresario, ayer el periodista admitió: “No desconocíamos que la situación económica de la empresa estaba complicada”, y añadió que la redacción hizo esfuerzos para ayudar sostener la revista.
Cano aseguró que cuando Vivanco les informó sobre el cierre del semanario -el jueves 27 de junio- les pidió que elaboraran una portada que dijera “El Gobierno ha ganado la pelea” y que Vanguardia se cierra por la Ley de Comunicación, argumentándoles: “Es inviable la manera de pensar de ustedes en un país de castrados”.
Según Cano, habría sido más digno que Vivanco admitiera que la falta de publicidad los “asfixió”, ya que, a más de sustentar su decisión en la Ley de Comunicación, en esa reunión también les comentó que su patrimonio se acababa.
“Nos asfixiaron comercialmente, con la publicidad... Porque había empresarios, y el Dr. Vivanco tiene los nombres, que se sentaban con él -porque salía a buscar publicidad, algo que no había hecho en 30 años, según sus propias palabras- y le decían que era excelente la revista, ‘yo les apoyo’, ‘sigan ahí’, pero que no podían poner publicidad porque estaban con tal cosa que el Gobierno controla”, relató el comunicador, quien laboró 4 años en Vanguardia.
Cano citó que de 140 investigaciones,
más de 100 fueron tomadas por los organismos de controlPor ello, le sorprendió que el empresario haya asegurado que la edición 398 -que circuló en la web- no contaba con su aval y que fue elaborada por decisión autónoma de quienes integraban la redacción, luego de que los periodistas le dijeron que argumentar el cierre en la ley no era posible, ya que Vivanco insistía en publicar un resumen de la trayectoria de la revista con una portada diciendo que “Correa ganó la pelea”, solicitud que consideraron como una imposición.
“El tema del patrimonio está correcto porque uno no puede tener un grifo abierto cuando por todo lado lo están cercando... Lo de la Ley de Comunicación para nosotros no es entendible; si no, lo reto al mismo Dr. Vivanco a que cierre La Hora; a los demás medios, El Comercio, Hoy, que por la Ley de Comunicación cierren; a las radios que cierren porque la ley no nos permite expresarnos libremente. Eso es absurdo”, enfatizó Cano.
Además, negó que el impreso haya estado a cargo de 90 personas -como expresó Vivanco a Radio Visión- y dijo que la redacción estaba conformada por apenas 12 personas, que sumadas al personal de prensa y otras áreas serían alrededor de 30, no más. También cuestionó que Vivanco haya afirmado que la decisión fue discutida con los editores de la revista de todo el país, cuando en realidad eran solo tres: Cano, Iván Flores y Juan Carlos Calderón.
Para Cano, es lamentable que Vivanco, a sus 67 años, haya acudido a esa emisora para decir “falsedades” porque la redacción no estuvo de acuerdo con una portada que, a su criterio, no era cierta: “No podía censurar lo que nosotros pensábamos, hasta la nueva ley prohíbe eso, la Constitución prohíbe eso”.
Frente a ello, el periodista Diego Oquendo, quien en su espacio de entrevistas manifestó: “Con el Sr. Vivanco tengo una cordial amistad, pero ningún compromiso”, también justificó la decisión del empresario sosteniendo: “Es evidente que trabajar bajo el auscultamiento de la nueva Ley de Comunicación es muy complicado, es decir, se espera un ambiente asfixiante, créame. Y es posible que esos factores sensibilizaron al Dr. Vivanco, que aparte de eso tenía que afrontar el problema económico”. También, recogiendo los cuestionamientos de Vivanco hacia la publicación de notas sobre el exsecretario de la Administración Vinicio Alvarado, el canciller Ricardo Patiño, del presidente Rafael Correa, le consultó a Cano sobre el “giro sutil de la revista” al concederles páginas completas.