En estas semanas se estrenará al fin Nina, última serie de la productora de David Reinoso y Flor María Palomeque y Teleamazonas, con difusión nacional, excepto para Guayaquil.

Mientras tanto, Ecuavisa ya puso al aire La Trinity, aún por determinarse si es novela o serie, ya que al término de esta semana cumplirá ocho capítulos al aire y los tres primeros, del 7 al 9 de septiembre, no pegaron ni fuerte ni con sazón. Musicalmente hablando, en cuanto a musicalización y canciones originales, La Trinity goza de sandungueo paseándose entre la salsa choke y baladas románticas. En libretos y actuación no arranca aún, ya que muchos personajes, las locaciones, el estatus social de unos y otros parecen más bien estereotipos o caricaturas de lo que quieren representar, no retratos ni imágenes fieles a la Isla Trinitaria, las personas de barrio humildes y trabajadoras, los nuevos ricos ‘hechos’ al son de negocios rectos y turbios. Ejemplo, Fernando Villarroel está en extremo sobreactuado y poco verosímil en la piel de don Pedro Periñón, el dueño del Trinimarket; al igual que Carolina Ossa como la adinerada y elitista Chichi, solo convence en apariencia.

A Diego ‘Don Day’ Álvarez, a pesar de resultar apto para la peculiar comedia de El Combo Amarillo, le falta comprometerse más con las fibras sentimentales para ser buen actor de drama. Samantha Grey posee una voz muy dulce y comete el peor error para una actriz protagónica, hablar muy suave y bajo, a la par que se traga las palabras. Las cámaras y micrófonos de última tecnología tampoco pueden resolver todas las deficiencias de los noveles actores en escena. Considerando que dos de los tres directores fueron responsables de El Combo Amarillo se intuye qué tipo de humor primará en los momentos cómicos de La Trinity. Mientras que los editores parecen estar aún indecisos porque hay empates y empalmes audiovisuales que perjudican la progresión de la historia, muy breves y ligeros, por suerte.

La presencia de Andrés Caballero como Luis Fernando, hijastro de don Periñón sin que él mismo lo supiera, es grata para el factor comedia. Sin embargo, para el triángulo amoroso protagonista de La Trinity, su voz y entonación como ‘aniñado’ pueden resultar molestas y molestosas con el tiempo. Por ahora, actoralmente solo han parecido destacar Tábata Gálvez y Fernando Villao, aunque el segundo realice un personaje de gay vengativo que pueda resultar muy caricaturesco.

Otros actores experimentados, como Giovanny Dávila, Giovanna Andrade, Mercedes Payne, Kristhel Chuchuca, Monserratte Serra, Jonathan Estrada, se pierden por ahora en el fondo. Los personajes de algunos de ellos no son nada que no hayan representado en el pasado y, en el caso de otros, son muy planos en cuanto a su aporte a la naciente historia. Los tres directores y el director general-creador de la telenovela aún tienen mucho trabajo por delante.

Serán 90 capítulos que explorarán historias de amor prohibido y venganza. Se espera que los cinco libretistas, incluidos los aportes de Xavier Hidalgo (+), desemboquen en una gran historia de aceptación masiva y popular. Por ahora todo está por verse, mientras la edición no genere confusiones. (O)