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La TIU investiga un partido de Grand Slam
La Unidad de Integridad del Tenis (TIU) investiga el flujo alto de apuestas a la victoria de la pareja formada por Lukas Kubot y Andrea Hlavackova sobre David Marrero y Lara Arruabarrena, la tarde del domingo en el Open de Australia.
La TIU se ha puesto en contacto con dos de los protagonistas, en este caso Kubot y Hlavackova, para saber si notaron alguna actitud extraña en sus rivales, que tenían todas las de perder según los apostadores. La casa Pinnacle Sports canceló las apuestas 13 horas antes del inicio del partido.
Marco Blume, jefe de apuestas de Pinnacle Sports, advirtió que se apostaron enormes e inusuales cantidades de dinero a favor de la dupla conformada por Hlavackova y Kubot, lo que indicaba que el partido podría haber sido amañado.
Para tener una idea, las cantidades que habían sumado todos los partidos dobles mixtos de este Open de Australia, hasta dicho encuentro, rozaban los 1.900 euros. El partido entre Marrero-Arruabarrena/Kubot-Hlavackova movió, hasta antes de empezar el choque, cantidades que superaban los 25.000 euros.
Marrero y Arruabarrena darán hoy su versión de los hechos. El ‘canario’ saltó a jugar con molestias en la rodilla que incluso le hicieron plantearse el no saltar a la pista.
Arruabarrena, por su parte, repetirá presencia en el equipo de Copa Federación que viajará a Serbia para jugar la primera eliminatoria de 2016, el 6 y 7 de febrero próximos.
Kubot y Hlavackova, que cedieron ayer contra el indio Rohan Bopanna y la china Yung-jan Chan por 4-6, 6-3 y 10-6, reconocieron a la conclusión “estar sorprendidos por la expectación levantada. Nosotros jugamos al 100% y tampoco vimos nada raro en nuestros rivales. No es justo que salgan ahora sus nombres sin pruebas. Antes de sacar este tipo de informaciones se debe tener pruebas contundentes”, dijo Kubot.
Una investigación conjunta llevada a cabo por la BBC y BuzzFeed News destapó hace una semana que 16 jugadores clasificados entre los 50 primeros, algunos de ellos ganadores de torneos del Grand Slam, son sospechosos de haber amañado partidos en la última década.
Los informes dijeron que la TIU -creada para vigilar las actividades ilegales en el deporte- no actuó en la identificación de las conductas sospechosas entre los jugadores ni impuso sanciones. A todos los jugadores se les permitió seguir compitiendo. Ocho de los profesionales señalados estarían jugando en este momento el Abierto de Australia, que arrancó la semana pasada.
Según estas informaciones, varias bandas de mafiosos de Rusia, Italia y Sicilia se reunían con los jugadores en las habitaciones de los hoteles en los torneos y les ofrecían 46.000 euros o más por manipular los partidos. (I)