“No quiero vivir de la forma que los medios dicen que un artista de éxito debería vivir”, asegura el intérprete, compositor y productor Will.i.am. Para él existe una “desilusión” provocada por la industria musical en la presentación de un proyecto de ayudas a jóvenes marginales.

William James Adams, nombre real del ex integrante de The Black Eyed Peas, ha participado en las conferencias del Mercado Internacional del Disco y de la Edición Musical, el MIDEM 2014, para tratar un aspecto que frecuentemente el sector olvida en su denodada ofuscación con las cifras económicas: la filantropía.

‘Trans4m’ es el último proyecto humanitario de Will.i.am, quien previamente creó la fundación ‘I Am Angel’ para asistir a víctimas de desastres naturales.

“¿Por qué esperar a un huracán o un tsunami para que la industria musical eche mano de todo su éxito y lo focalice en una contingencia? Yo quería que ‘I Am Angel’ ayudara a resolver situaciones urgentes y cotidianas de las que los medios no hablan”, ha explicado el artista, en una charla vía Skype en la que se ha mostrado simpático y enardecido a partes iguales.

Hace dos años empezó a asistir a través de “Trans4m” a 60 niños de su barrio natal, el marginal Boyle Heights de Los Ángeles. Actualmente, ya son 120 y su idea es que en 10 años sean 600 los jóvenes que hayan pasado por su programa educativo, en el que les animan a “hacer cosas que nunca se habrían creído capaces de hacer”.

El reciente productor de Britney Spears y Miley Cyrus ha exhortado a otros artistas a seguir esa actitud proactiva, igual que a la gran industria, a la que ha acusado de ser “muy perezosa” y de haberse estancado en sus aspiraciones cuando disponía de todos los medios a su disposición.

“Deberíamos haber sido Facebook antes que nadie, deberíamos haber sido Twitter. ¡Podríamos haber sido incluso Apple!”, exclama, aludiendo a la propietaria de la mayor plataforma de descarga digital legal, iTunes, con la que no parece estar muy contento.

A este respecto, el autor junto a David Guetta del tema más descargado de la historia de Internet, ‘I gotta feeling’, ha dicho que la industria musical lo “entristece”.

“Nos encontramos en un estado lamentable, en el que los artistas están vendiendo... Para ser honestos, no sé siquiera qué estamos vendiendo, descargas de 99 centavos, eso es lo que estamos vendiendo”, ha dicho Adams, que obtiene más ingresos de su participación en una empresa de hardware musical -The Beats, junto al rapero Dr. Dre- que de las descargas de “I gotta feeling”.

“Lo doy todo para no obsesionarme con la desilusión que me provoca la industria musical actual y lo hecha astillas que está. Quizás estoy persiguiendo algo que probablemente nunca alcanzaré, pero ya pasé por esto en el pasado cuando vagaba por el guetto persiguiendo el sueño de fundar una banda”, finalizó.