Laura Pausini es una de las artistas más esperadas en Viña del Mar. Su participación está prevista para hoy. Llega ahí con un nuevo disco y después de cantar en el festival chileno se irá a México (28 de febrero), Miami (2 de marzo), Nueva York (el 6) y Toronto, Canadá (tres días después) para continuar con su gira 20 Greatest Hits.

A sus 39 años se considera una mujer afortunada con su maternidad, algo que anhelaba desde hace 20 años, pero no concretaba por su carrera.

Hace un año debutó como madre, suceso que la inspiró para su canción ‘Así celeste’, concebida antes del nacimiento de su hija Paola Carta.

Aquello se refleja en estribillos como: “Con los ojos de tu padre/y su gran melancolía/ un silencio que al atardecer descubre/el color de la marea/ tú llegarás...”.

“Imagínate la sorpresa y la maravilla que es levantarme todos los días y ver a mi hija. Es un momento muy especial de mi vida personal y de mi carrera, y quiero disfrutarlo. Me he convertido en madre en el mismo año en que empecé a celebrar mi vigésimo aniversario como cantante. Además, mi hija nació en febrero, en el mismo mes del Festival de San Remo de 1993, que marcó el comienzo de mi carrera, y el mismo día en que -en el 2006- gané el Grammy. Febrero también es el mes de Viña del Mar. Son increíbles las coincidencias que vinieron con Paola”.

Antes de ir a Viña del Mar, Pausini ha concedido varias entrevistas a distintos medios latinos, entre ellas a diario argentino El Clarín y al portal Univisión. Allí la intérprete italiana se refiere a su faceta como madre, sus 20 años de carrera y de quienes la acompañarán en sus presentaciones en Estados Unidos.

¿Es diferente ser madre a como lo había imaginado?
Pensaba que iba a tener miedo por la responsabilidad que implica, y no lo tengo. Al contrario, me siento muy emocionada por saber que ella va a crecer a partir de lo que su padre (Paolo Carta, su pareja desde el 2005, también guitarrista y director musical de su banda) y yo podemos enseñarle.

¿Ella viaja con usted en giras?
Viaja conmigo desde que tiene cuatro meses. La primera vez fue a Londres. Desde ese momento vimos que le gustaba viajar, y entonces tratamos de traerla a la mayor cantidad de lugares posibles. Estuvo en México, en Brasil, en Florida, en Nevada.

¿Ve a su hija como cantante?
Espero que no sea cantante, porque en Italia la gente es muy dulce conmigo, pero es una tierra que no acepta con facilidad a los hijos de los famosos que hacen lo mismo que sus padres.

¿Ser madre le cambió en algo la forma de cantar?
Tengo la voz media octava más alta.

Luis Fonsi será uno de sus acompañantes en Miami, ¿cómo surgió ese vínculo?
La amistad comenzó cuando grabamos el tema ‘Todo vuelve a empezar’, el cual está incluido en el disco Palabras del Silencio.

Luis es un artista increíble, su voz tiene un talento único y es un verdadero placer para mí poder presentar una canción que nunca hemos interpretado juntos, durante mi vigésimo aniversario en los escenarios y ante mi queridísimo público de Miami. Será maravilloso.

También estará con usted Biaggio Antonacci con quien ha hecho dueto en la canción Entre tú y mil mares...
Biagio es un diamante de la música italiana. Él es un amigo y un artista único que ha querido estar conmigo además de Nueva York también en el concierto de Miami. Mis fans estarán en el séptimo cielo porque finalmente conocerán a quien ha escrito dos de mis canciones que más aman.

¿Qué balance hace de estos 20 años de carrera?
Hice una carrera impresionante. Qué puedo decir: todo lo que he vivido es más grande de lo que he soñado. Yo solo quería ser cantante de piano bar, algo que significaba poder mantenerme económicamente cantando, algo que en mi país no es fácil. He cantado en cinco idiomas, con tantísima gente.

¿Qué le queda por hacer?
Quiero creer que todavía no he cantando mi mejor canción. Pero mis sueños no son a nivel artístico o profesional, son más íntimos y después los escribo en las canciones. A veces sueño con hallar una silla que esté bien en mi cuarto y lloro cuando la encuentro. Ahora mi sueño más grande es tener la posibilidad de comprarle el delantal de la escuela a mi hija.

El día en que la vea con el delantal, me desmayo.