En la historia del cine y la televisión siempre han existido personajes representados por actores enanos que quedaron en la memoria del público, por ejemplo, Hervé Villechaize, conocido por su rol como Tatto, quien participó en la serie de televisión ‘La Isla de la Fantasía’ (1978); Danny Woodburn, quien hizo de Otli en ‘Conan’ (1997) o de Grimm en ‘Mirror, mirror’ (2011); así como Verne Troyer, quien interpretó a Griphook, uno de los duendes del banco Gringotts de la saga Harry Potter; o Warwick Davis, quien ha hecho de ewok en Star Wars desde 1983, pasando por uno de los enanos de Blancanieves (2001), Las Crónicas de Narnia, o en Harry Potter como el profesor Filius Flitwick.

Lo que todos tienen en común es que han representado a enanos, duendes, personajes de fantasía y en pocas veces representan roles hechos para personas más altas. Pero en la actualidad el actor estadounidense Peter Dinklage está rompiendo el estereotipo de que quienes sufren de algún tipo de enanismo solo pueden representar a personajes que midan menos de 1,50 m.

Si aún no le suena su nombre, tal vez reconozca al histrión por dos de sus personajes más recordados, el doctor Bolivar Trask en la última película ‘X-Men: Días del Futuro pasado’ o como Tyrion Lannister en la serie de televisión de la cadena HBO ‘Juego de Tronos’, con la que obtuvo en 2011 el Emmy y el Globo de Oro como Mejor actor de reparto, además de varias nominaciones hasta este año.

De acuerdo a Dinklage, siempre le ha molestado el hecho de que los enanos aparezcan en ‘escenas de sueños raros’ en cualquier película. Es por eso que hasta la actualidad él no tiene representante y solo confía en un mánager y en un abogado.

“Los representantes no me buscaban. No tenían imaginación para enviarme a hacer pruebas que no fueran para enanos. Solo contemplaban los anuncios navideños, y si me negaba a hacerlos, ¿qué podrían sacar de mí?”. Se podría decir que Dinklage tiene casi una alergia física a los zapatos de punta, a las barbas falsas y a interpretar a personajes mágicos y no terrenales.

Según George R.R. Martin, creador de la saga de libros en la que se inspiró el programa, Dinklage no solo fue su primera opción para que fuera Tyrion sino la única. “Si no hubiera aceptado el papel, habríamos tenido un problema. No sé qué habríamos hecho”, indicó Martin.

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“Cuando leí los libros de George, me pareció que Tyrion Lannister era uno de los grandes personajes de la historia de la literatura. No solo de la literatura fantástica, ¡de toda la literatura! Un tipo brillante, mordaz, sexual, borracho y que se flagela a sí mismo. Y solo había una opción para interpretar a tal personaje”, añadió David Benioff, co-creador de la serie.

El mismo Dinklage tuvo que enfrentar ese estereotipo desde que estuvo en el colegio. Uno de sus profesores reconoció su talento para el drama y decidió que forme parte en una obra irlandesa llamada ‘La tumba de Sharon’. “Fue la primera vez que interpreté a un personaje escrito para alguien de mi tamaño. Era un tipo despreciable al que su hermano disminuido siempre cargaba en su espalda, una relación al estilo de ‘De ratones y hombres’. Para mí supuso darme cuenta de que aún me quedaban muchas cosas por descubrir, no solo obras de Gilbert y Sullivan; también había personajes como aquel. Fue ya un tiempo después cuando decidí huir de los personajes escritos específicamente para gente de mi tamaño”, expresó Dinklage, quien luego de esa experiencia ingresó a estudiar en la Escuela Bennington, donde se graduó en la especialidad de Teatro.

Y al parecer para el actor de ascendencia alemana e irlandesa, la arrogancia con la que se lo identificó fue una ventaja a la hora de interpretar a Tyrion Lannister. “La arrogancia es un mecanismo de defensa. Cuando la gente te recuerda tanto lo que eres (y no me refiero a lo que tiene que ver con la fama sino a mi estatura) tienes dos opciones: o te escondes en un rincón oscuro o alardeas de ello y lo utilizas como escudo”, mencionó.

Asimismo, Dinklage indicó que se acercó a su conocido rol en ‘Juego de Tronos’ como si fuera “una versión mucho más arrogante de mí mismo”, pero que cada vez parece que se fusiona más con él. “Llevo ya dos años haciéndolo. Tal vez me haya afectado de alguna forma. Pero lo que me da pena es interpretar a un personaje que es mucho mejor persona que tú mismo”, dijo.