Después de la ruptura con su esposo Russell Brand, la cantante Katy Perry no oculta su depresión, al punto de anunciar durante la semana por Twitter que no iría a la 38ª ceremonia de los premios People’s Choice en la que se reconoce el talento de los famosos en la música, el cine y la televisión y que se realizó el miércoles pasado en el Teatro Nokia, de Los Ángeles.

Y así ocurrió, Perry no acudió a la gala, que transmitió la cadena CBS,  en la que ganó los cinco premios a los que aspiraba. La cantante californiana competía contra la casi siempre triunfadora Lady Gaga y Beyoncé, quien hace pocos días se convirtió en madre.  Las tres artistas ostentaban cinco nominaciones.

La excéntrica -por su ahora cabello  color rosa- y voluptuosa Perry se impuso  en las categorías de mejor  artista femenina favorita; artista principal en una gira; canción del año por E.T. a dúo con el rapero Kanye West; video musical por Last Friday Night y participación como  invitada a un programa de televisión por How I Met Your Mother.

En su mensaje de Twitter, Perry había escrito:  “Quiero agradecerles a todos por votar por mí, ¡tengo los dedos cruzados!”. Los ganadores son el producto de 230 millones de votos vía online que plantea la organización de estos premios y distribuyó a los nominados en 41 categorías.

Otros ausentes fueron los actores de la película Harry Potter and the Deathly Hallows: Part 2. El filme se llevó cuatro de los nueve galardones que aspiraba, entre ellos el de cinta favorita para los seguidores.

La ceremonia, que se caracterizó por la ausencia de muchos de sus ganadores, registró también la de Johnny Depp. Aunque no fue al Nokia para recoger su premio, él ganó como mejor actor de cine favorito por su interpretación de Jack Sparrow en Pirates of the Caribbean: On Stranger Tides y también por prestar su voz para el filme Rango.

Robert Pattinson, el casi eterno Edward Cullen, de la saga de Crepúsculo, acudió a la ceremonia, pero sin su característico copete y patillas a lo Elvis Presley. Más bien apareció con la cabeza rapada para recibir su estatuilla dorada como actor preferido de película dramática con Water of elephant. Él recibió el premio de manos de Ashley Greene, su también compañera de reparto en Breaking Down Part 1.

Pattinson, quien también lució una barba a medio afeitar, acudió a la gala sin su novia Kristen Stewart (Bella Swan en la saga Crepúsculo).

Aunque la ausencia de algunos famosos deslució la ceremonia, que condujo la actriz Kaley Couco  (Penny en The Big Bang Theory), hubo algunas presentaciones en vivo.

Una de ellas fue la que protagonizó Demi Lovato. Ella interpretó Give Your Heart A Break, y de paso se llevó a casa un premio como artista favorita en categoría pop.

Emma Stone, famosa por el filme Easy A, venció como actriz preferida de una comedia romántica por la cinta Crazy, stupid, love; mientras que Morgan Freeman fue elegido por los votantes como el ícono contemporáneo del cine.

Entre los ganadores de televisión destacaron las series How I Met Your Mother,  Two Broke Girls y otras producciones.