La agrupación Red Hot Chili Peppers se vieron obligados a cancelar un concierto previsto este fin de semana en el sur de Los Ángeles después de que el histórico líder de la banda, Anthony Kiedis, fuera hospitalizado por un “dolor estomacal extremo”, según informó un representante de la emisora de radio que organizaba el evento.

La banda debía ser el plato fuerte del espectáculo -el KRO Weense Roast- en el anfiteatro Meadows de Irvine, California, pero la emergencia de último minuto lo impidió, sin que se hayan dado aún detalles más precisos sobre el actual estado de salud de Keidis.

Según el Orange County Register, Empire of the Sun, los miembros de Red Hot Chili Peppers salieron al escenario para anunciar la cancelación del espectáculo. Fue Flea, el bajista del grupo, quien tuvo que comunicarle al público lo que estaba sucediendo. “Anthony está de camino a un hospital ahora mismo y no vamos a poder tocar esta noche”, indicó aquella vez.

“Estamos devastados por ello. Estamos muy tristes. Vivimos para el rock, vivimos para escarbar profundo en nuestros corazones y en el rock, pero desafortunadamente hay un asunto médico y teníamos que lidiar con eso”, agregó Flea.

Fue la mala noticia de un evento que se viene celebrando desde 1993 y que este año contaba, entre otros grupos, con Weezer, Panic! At the Disco, Garbage y Cold War Kids en su nómina. Se calcula que 16 mil personas estaban esperando la actuación de la formación californiana, que hace poco más de una semana presentó su canción ‘Dark necessities’, que forma parte de su disco The Getaway, el primero hace 5 años y el número 11 de su carrera.

El próximo concierto está previsto para hoy en Los Ángeles, a la espera de que los médicos autoricen o no a Kiedis para actuar. Según los galenos, Anthony Kiedis, de 53 años, sufre complicaciones de gastroenteritis, quizás causada como consecuencia de sus adicciones.

Se trata de un músico con un largo historial de adicción a la droga, enganchado a la cocaína y la heroína durante largos períodos de su vida. Lo atribuye en parte a la exposición que tuvo a ese mundo a través de su padre, quien le consiguió su primer porro de marihuana cuando apenas tenía 11 años. (I)