Kendall Schmidt, James Maslow, Carlos Pena Jr. y Logan Henderson pasan parte de sus vidas en los escenarios como miembros de Big Time Rush, una de las tantas ‘boy band’ (al estilo de los ochenteros New Kids on the Block, los noventeros Backstreet Boys o los actuales One Direction).

Sucede que con la creación de la banda en 2009, al productor Scott Fellows, responsable de otras series como ‘Ned’s Declassified School Survival Guide’, se le ocurrió reflejar cómo sería la vida de una ‘boy band’ fuera de los conciertos.
Kendall, James, Carlos y Logan conservan sus nombres reales, pero para la ficción de la serie ‘Big Time Rush’ adoptan los apellidos Knight, Diamond, García y Mitchell.

Incluso, sus personalidades  en la serie son muy marcadas y exageradas. Kendall es el mediador y pacífico; James, quien se cree guapo, hace ademanes extraños y se ve demasiado al espejo.

Carlos es el latino loco que usa un casco, mientras que Logan es el que tiene mejor coeficiente intelectual, aunque también se le suele soltar un tornillo, especialmente cuando está presionado por Camile Roberts (interpretado por Erin Sanders, quien era Quinn Pensky en la desaparecida serie Zoey 101).

Los cuatro se consideran galanes. Se pelean por conquistar a la primera que se les cruza por el camino. No obstante, quien consigue novia es Kendall, con la ayuda de su pequeña hermana Katie (Ciara Bravo). Ella le dice a Kendall que Jo Taylor (Katelyn Tarver), la rubia chica que a él le gusta, no tiene novio. Katie se lo inventó para atraer aún más a Kendall. Y lo logra.

La trama de Big Time Rush gira en que ellos trabajan para Gustavo Rocque (Stephen Kramer Glickman), un obsesivo productor que se irrita con facilidad y habitualmente se desquita con Kelly Wainwright (Tanya Chisholm), su afroamericana asistente.

La disparatada serie de Nickelodeon se estrenó el 18 de enero de 2010 y a Latinoamérica llegó en abril del mismo año. Su capítulo más visto es ‘Big Time School of Rocque’ con 6,8 millones de televidentes.