El cantante mexicano Alejandro Fernández se le diagnosticó gangrena gaseosa, luego de la mordida de un perro que le provocó una herida de gravedad en la pantorrilla izquierda. Al complicarse la lesión, El Potrillo fue hospitalizado para ser sometido a una cirugía que le impidió seguir con varias presentaciones organizadas. “Me di cuenta que la vida es frágil y que en cualquier momento se puede desvanecer”, dijo Alejandro Fernández a través de un comunicado.

La recuperación del intérprete de ‘Abrázame’ va viento en popa, pues a través de sus redes sociales ha mostrado fotos donde se lo ve paseando en su rancho de Guadalajara. “Estoy en reposo total y recuperándome en casa. Seguiré todas las indicaciones para poder compartir con mi público a la brevedad. Como siempre, gracias por todas sus oraciones, su comprensión y apoyo. Los veo pronto en Monterrey y Torreón”, escribió el artista en su cuenta de Facebook.

Pese a los mensajes de gratitud con sus seguidores, el hijo de Vicente Fernández no reveló la fecha en que reanudaría las presentaciones, puesto que en varias ciudades de México se cancelaron las presentaciones. En varios casos las entradas fueron vendidas.

En las redes sociales, más allá de las palabras de aliento al cantante, se desató la polémica porque después del incidente se reportó que uno de sus perros más queridos había muerto. Los usuarios en Twitter sugirieron que el perro que murió fue el mismo que mordió al cantante y fue sacrificado. Fernández compartió un video en las redes el que está rodeado de sus perros, entre ellos Antuan, con la canción de fondo ‘El ciclo sin fin’, que interpreta junto a su hija Camila. (I)