La sábila tiene beneficios curativos ancestrales que continúan vigentes
El aloe vera, más conocido como sábila, se utiliza en la medicina natural y ancestral por sus propiedades curativas. Esta especie produce dos sustancias que son de aplicación médica, señaló un estudio de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE).
Estos son un gel y un látex. El primero es una sustancia transparente, que se encuentra en las hojas de la planta y el látex, de color amarillo, se obtiene por debajo de la piel de la planta.
“El uso de la sábila es ancestral porque nuestros abuelos ya la ocupaban para tratar sus dolencias”, explicó Marcia Tenesaca, estudiante de Medicina Andina de la universidad Jatun Yachay Wasi.
“Mi abuelo se curaba con la sábila, hacía emplastos para tratar sus heridas o preparaba para tomarla”, agregó Tenesaca, quien recuerda que su abuelo falleció a los 110 años de edad.
Ella heredó los conocimientos sobre las propiedades de la sábila de sus abuelos y de su madre.
Existe gran variedad de usos que se le da al aloe vera. “La sábila sirve para detoxificar el cuerpo, para depurar la sangre, como antiinflamatorio, para tratar golpes, quemaduras o heridas”, mencionó Zoila Herembás, tecnóloga en Medicina Andina en la universidad Jatun Yachay Wasi, ubicada en Riobamba.
Para tratar un golpe o hinchazón, se parte una hoja de sábila por la mitad, se agrega una pizca de sal, se la calienta y se aplica sobre la parte afectada, detalló la tecnóloga.
Para las heridas sangrantes, se usa el aloe vera en forma de emplasto. Según Herembás, para este tratamiento se saca el cristal de las hojas de acuerdo con el tamaño de la lesión.
“Se mezcla la pulpa de la planta con tierra virgen hasta obtener una masa homogénea, el emplasto se aplica en la parte afectada”, dijo.
Mientras que la máchica (harina de cebada) acompaña la receta que se usa para aliviar los dolores de espalda. Se hace un emplasto de sábila con la máchica y se agrega cola de caballo finamente picada para luego aplicarla.
Para preparar las bebidas medicinales o infusiones, Herembás indicó que se recomienda cortar las hojas cuando la mata está en floración.
Tenesaca expresó que hay la sábila macho y hembra. “Las dos especies las usamos para tratar enfermedades, pero siempre tenemos ambas por la dualidad”, manifestó la mujer en alusión al principio de la cosmovisión andina que marca el equilibrio.
Tenesaca y Herembás resaltaron que, para aplicar ciertos tratamientos, se debe tener los conocimientos sobre esta planta medicinal.
Bebidas medicinales sobre la base de aloe vera, las más demandadas
María Quilambaqui vende aguas medicinales en el centro de la ciudad. Indica que la sábila es una de las más demandadas por sus clientes. Todas las mañanas prepara tres recipientes medianos con una infusión que son vendidos hasta el mediodía. “Es buena para los riñones y el hígado”, sostuvo la mujer, quien utiliza dos jarras para mezclar los ingredientes.
Los productos que se utilizan para estos preparados son, entre otros, uña de gato, boldo, chancapiedra, maca, miel de abeja, linaza y toronjil.
El tecnólogo en Medicina Andina, José Sánchez, precisó que para ingerir los preparados basados en esta planta se debe cortar una hoja y dejarla reposar toda una noche.
“Se corta los filos y la punta de la planta, se deja reposar durante la noche y al siguiente día se la pica en cuadros, con todo y cáscara y se la licúa con un poco de miel”, manifestó.
Agregó que se lo toma en novenario como tratamiento para la limpieza del colon.
Sánchez recomendó que las familias practiquen “esta sabiduría ancestral, como una forma de mantener la buena salud”.
En un estudio llevado a cabo por la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), se destaca que el gel de sábila “es un excelente tratamiento para aplicarlo en adultos en casos de esofagitis, gastritis y trastornos ulcerativos gastroduodenales y favorece además en el tratamiento de colecistolitiasis”, que es la irritación de la vesícula biliar. (I)
